Mundial de natación 2023
Popovici, un Mundial para olvidar
Marchand vuelve a impresionar en la final de 200 estilos, en la que Hugo González acabó séptimo
MacIntosh, a sus 16 años, bate el récord júnior de los 200 mariposa
Waterpolo: España pierde de forma cruel ante Hungría y queda apeada de la lucha por el oro
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Iniciar sesiónEstaba llamado a ser la gran sensación del Mundial de Fukuoka, donde participaba en las dos pruebas reinas, los 100 y los 200 metros libres, en los que incluso amenazaba a los granes récords aún por batir. Pero fue un fracaso. David Popovici se ... marcha de vacío de Japón. Si el pasado martes quedó cuarto en la final de los 200 libres, este jueves ha quedado relegado a la nada en la fina de los 100 libres, prueba en la que ha quedado sexto. El fenómeno rumano, quien con 16 años nadó la final de los Juegos de Tokio en los 100 libre, con 17 se convirtió en doble campeón mundial en Budapest y fue plusmarquista mundial de los 100 libre (46.86) y tercer nadador más rápido de la historia en los 200 (1:42.97), ha estado muy lejos de su versión en Fukuoka.
Desde el principio de la prueba ya se adivinó que Popovici iba a tener que sudar sangre para subir al podio. Pasó cuarto en el primer 50 y vio como le superaban con facilidad. El oro fue para el nadador australiano Kyle Chalmers, que volvió en 24.11 (el tercero más rápido de la historia) para marcar 47.15. La plata se la colgó el estadounidense (47.31) y el bronce para el francés Maxime Grousset, con 47.42. El joven chino Zhanle Pan, de 18 años, batió el récord de Asia (47.43). Popovici se marcha de Fukuoka en blanco y sin poder renovar los títulos que logró en Budapest el año pasado.
La cara positiva fue para la joven canadiense Summer McIntosh, ganadora de cuatro medallas en los pasados Mundiales. McIntosh logró el oro en los 200 mariposa (2:04.06), con una marca que batía el récord mundial júnior. «Estoy todavía en proceso, cogiendo experiencia a nivel internacional, quiero absorber la energía del público y divertirme», explicó la canadiense, que estuvo a punto de batir el récord del mundo. La segunda en tocar la pared fue la australiana Elizabeth Dekkers (2:05.46) y el bronce fue para la estadounidense Regan Smith, con 2:06.58.
Australia líder en el medallero
En los 50 espalda venció la australiana Kaylee McKeown, quien logró su mejor marca personal y récord de Oceanía (27.08). Regan Smith (27.11) tuvo que conformarse con la plata y la británica Lauren Cox (27.20) con el bronce. Y en los relevos, Australia se reafirma como líder del medallero y sus relevos femeninos le están pasando la mano por la cara a Estados Unidos. En el 4x200 libre, con Ariarne Titmus y Mollie O'Callaghan al frente, Australia ganó el oro y pulverizó su propio récord con 7:37.50. Estados Unidos fue plata y China bronce.
Los 200 estilos tenían un protagonista español, Hugo González, pero el protagonismo lo acaparó, de nuevo, Leon Marchand. El español quedó séptimo. Logró el tercer mejor parcial en espalda pero su actuación en la tanda de braza y estilo libre le hizo perder opciones de medalla. No obstante, pude desquitarse al clasificaerse octavo media hora después para la final de los 200 espalda. La prueba fue para Marchand, que no tuvo oposición y dio una exhibición en la posta de mariposa. Se colgó el oro batiendo el récord europeo (1:54.82) que estaba en poder del legendario húngaro Laszlo Cseh. La plata se la colgó Duncan Scott, que nadó por la calle 5 junto a Hugo, mientras que el bronce fue para el también británico Tom Dean, que sorprendió con un último estilo libre de 27.12, el más rápido de todos con más de un segundo de diferencia (1:56.07).
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