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Benzema, mejor jugador: de los sándwiches de atún con tomate de gasolinera a número uno del fútbol

los mejores de la UEFA 2021 - 2022

El delantero del Real Madrid corona su gran temporada en el trono individual del fútbol europeo

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Benzema con el trofeo de mejor Jugador del Año UEFA AFP

Rubén Cañizares

25/08/2022
Actualizado 26/08/2022 a las 08:30h.

En el último cuatrimestre del año, Benzema tiene muchas papeletas para sufrir agujetas en sus brazos. Hace tres semanas levantó la Supercopa de Europa, el primer trofeo que eleva al cielo como capitán del Real Madrid, una vez que Marcelo ya no está ... en la plantilla. Esta tarde, en Estambul, ha hecho lo propio con el reconocimiento al mejor gol de la Champions (0-1 al Chelsea en la ida de cuartos) y trofeo a jugador del año de la UEFA 21-22, un galardón de sobra merecido en el que ha superado a su compañero Courtois y a De Bruyne. No será el único. El 17 de octubre, salvo sorpresa inesperada, logrará el primer Balón de Oro de su carrera. También en esas fechas recogerá su primer Pichichi, como máximo goleador de la pasada liga, y para el premio The Best, aún por determinar la fecha de entrega, también es el candidato número uno.

Reconocimientos todos ellos para el gran protagonista del ejercicio 21-22 en el que el Real Madrid ganó su Champions número 14, su Liga número 35 y una Supercopa de España más. Títulos en los que Benzema fue absolutamente decisivo para su conquista con un total de 44 goles y 15 asistencias, sus mejores números de siempre: «Ahora con 34 soy mejor, juego mejor. Es verdad que a nivel personal esta fue la mejor temporada de mi carrera, pero hay algo que no ha cambiado. Yo entro al campo pensando en lo que tengo que hacer para ganar el partido, pienso en el equipo, no en mí», comentó Karim al recoger el trofeo.

La marcha de Cristiano, en el verano de 2018, tras ganar la Décima, provocó el nacimiento de un nuevo Karim. Un bien colateral de un adiós que, al principio, trajo más depresión que nuevas perspectivas. Sin Ronaldo, y con Bale desaparecido, el horizonte pintaba gris oscuro, pero Benzema se dijo a sí mismo que el nuevo líder y futbolista franquicia del Madrid debía ser él. Y así fue. Asentó su vida familiar generando una buena relación y sintonía entre las dos madres de sus hijos, aumentó sus horas de entrenamiento con trabajo individual junto a fisios del club en su domicilio de Ciudalcampo, y contrató un nutricionista con el que hizo cambios radicales en su dieta, introduciendo en ella importantes novedades como el agua alcalina -como ya desveló ABC el pasado mes de mayo- y la eliminación de la comida basura, en especial los sándwiches.

Hubo un momento en el día a día de Karim en el que el francés se llegaba a comprar en una gasolinera siete u ocho sándwiches de atún con tomate, un (mal) hábito que le perjudicaba bastante en su rendimiento. Esta y otra serie de rutinas incompatibles con un deportista de élite fueron saliendo de su vida a la vez que su fútbol, su rendimiento y su liderazgo en el vestuario subía partido tras partido hasta convertirse en lo que es hoy: el futbolista franquicia del Madrid y el mejor jugador de Europa y del planeta.