Giggs, cuarenta años del galés eterno

Las canas revelan su edad, pero no es más que una cifra que sirve para magnificar su gesta. Giggs, con 40 años, lo es todo para la gente de Old Trafford y sigue asumiendo un papel fundamental en el club de su corazón. Pertenece al selecto grupo de jugadores de un solo equipo y lleva 953 tardes defendiendo la camiseta roja de Manchester.

«A veces puede ser duro pero todavía sigo disfrutando . Siempre que sea así, seguiré adelante», confesó en una entrevista a la BBC, el hombre del día que recibió un reloj por parte de sus compañeros y recibió varias sorpresas. Giggs, siempre prudente, héroe silencioso que se ha dedicado básicamente a jugar, prefería pasar el día en la cama para evitar las bromas, pero cuarenta son cuarenta. Y más para un futbolista de primer nivel.

«No parece cansado»

Recuerda sus inicios, cuando observaba a los pesos pesados del vestuario y se quedaba embobado por compartir habitación con hombres curtidos en mil batallas . « Ahora no sé qué pensarán de mí los más jóvenes del equipo », cuenta él. Esos jóvenes piensan en parecerse en algo a él, pues no ha trascendido ni una mala palabra sobre este jugador de banda, exquisito toque de balón y visión privilegiada.

«No parece cansado por su edad. Su visión y sus aptitudes son increíbles . Soy un afortunado por trabajar con él», comenta David Moyes, actual técnico del Manchester United que tiene en su staff a Giggs como asesor y consejero . Nadie conoce a ese vestuario mejor que el galés.

Dice Moyes que Giggs mejora con los años, un futbolista hecho a sí mismo en función del fútbol que le toca vivir. Ha pasado por etapas muy distintas y siempre ha resultado ser un pelotero magnífico. «La gente habla de su edad, pero debería hablar también de su capacidad para jugar al fútbol. Es un futbolista increíble. Ryan nos dirá cuándo ha tenido suficiente o cuándo piensa que ya ha terminado, pero se podría decir que su visión cada vez es mejor», añade su técnico.

23 años en Old Trafford

Hay jugadores de la primera plantilla del Manchester United que ni siquiera habían nacido cuando debutó Ryan Giggs. Era el dos de marzo de 1991 en un encuentro contra el Everton y poco después, el cuatro de mayo, marcaría su primer tanto oficial. Fue contra el Manchester City, con quien estuvo en las categorías inferiores antes de trasladarse a otro barrio de la ciudad.

« Si hubiera cambiado de equipo ya me habría retirado . He tenido suerte de estar en un gran club, con notables jugadores y un buen entrenador. Cada día entreno para estar disponible. Disfruto todo lo posible ayudando al equipo».

Más que él no lo ha hecho nadie, palmarés estratosférico con sus casi 1.000 partidos con el United. De esos 953, 626 son en la Premier y 149 en la Champions , más que nadie en la máxima competición continental. Y goles, 168 para llevar a su club a lo más alto. Tiene 13 Premiers, dos Copas de Europa , nueve Community Shields, cuatro FA Cups, cuatro Copas de la Liga, una Supercopa de Europa, una Intercontinental y un Mundial de Clubes. Él solito tiene un museo repleto de trofeos y distinciones individuales.

Es el último superviviente de la «clase del 92» , promoción brillante de la que se llegó a hacer un documental para que permaneciera el recuerdo de esa mezcla y que triunfó en los cines. Paul Scholes, Phil Neville, Gary Neville, Nicky Butt, David Beckham y el propio Giggs, jugadores que inspiraron a una generación histórica y que se hicieron hombres con los gritos y consejos de Sir Alex Ferguson .

Giggs aguanta el paso del tiempo y es un orgullo para sus amigos. « No me sorprende que todavía esté jugando. Tiene un gran talento y se ha cuidado de forma increíble en los últimos años», desvela Beckham , el mediático de ese grupo de talentos que bromea sobre la longevidad de su compañero. «Ryan me hace sentir viejo». De esa quinta, nadie ha durado tanto como Giggs, el galés inmortal, historia viva de Old Trafford y leyenda del fútbol.