Christian Parejo pone un pie en la final tras cortar una oreja en la primera novillada nocturna de Las Ventas

José Antonio Lavado se presentaba en Las Ventas, y su primer novillo en la plaza Monumental, amén de escaso de trapío, estaba bastante justo de raza. Los primeros tercios transcurrieron sin mucha historia, y poco se pudieron lucir en los quites, aunque Lavado pudo dejar una buena media al colocar al novillo en el caballo. Lo mejor de la labor del novillero fue faena inicio: unos toreros doblones, abrochados con un bonito trincherazo. Poco más se dejó el de Torrehandilla, que no tenía prácticamente recorrido, y cuando pasaba lo hacía sin decir nada. Lavado intentó infructuosamente llegar a los tendidos, pero viendo las condiciones del animal, fue por la espada. Tras un pinchazo, dejó una estocada entera algo trasera pero eficaz.

El cuarto era una pintura, un bonito jabonero mejor presentado que los anteriores. El comportamiento hizo honor a sus hechuras: fue mal picado, y llegó a la muleta sin recorrido y pegando derrotes. Lavado, que tomará la alternativa en la próxima feria de Málaga, lo intentó por los dos pitones, aunque la faena nunca llegó a tomar vuelo. No faltó voluntad, pero sí oponente. La estocada no fue suficiente, y necesitó del uso del verduguillo.

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Alejandro Mora tuvo como primer oponente un novillo bastante escaso de trapío y de embestidas descompuestas. El extremeño, que estuvo más a gusto con la mano derecha y pudo pegar algún buen muletazo por ese pitón, dejó algunos detalles de toreo caro, pero poco más por la falta de raza de su adversario. La espada le cayó baja, lo que no impidió que hubiera petición, aunque no caló. Palmas.

La novillada fue igual en los primeros tercios: distraídos, sólo buscaban mas tablas, y no ponían facilidades para los banderilleros. Pese a eso, Diego Ramón Jiménez y Pascual Mellinas destacaron en ese tercio durante la lidia del quinto. Citó Alejandro Mora al novillo desde los medios para empezar la faena toreando directamente. El de Torrehandilla, que no paró de mugir toda la faena, no fue nada fácil. Estuvo muy firme Mora con el novillo, que pese a su condición de manso, tenía genio y era brusco. Tras un pinchazo, entró a matar con todo y fue prendido de manera muy fea, aunque sin consecuencias. Palma para el novillo, y ovación desde el tercio para el extremeño.

Con una alarga de rodillas recibió Parejo al tercero. Poco más destacó los primeros tercios, con un novillo que no tenía fijeza e iba a su aire. Si desde el inicio se vio la mansedumbre del de Torrehandilla, fue a peor tras clavar un pitón en la arena en medio de una tanda, y dar una voltereta que por poco no se cae encima de Christian. No obstante, el gaditano demostró poder y técnica, y estuvo muy por encima de su oponente, especialmente al natural, aunque mostró mucha soltura con las dos manos. Una buena estocada suficiente para finiquitar el tercer episodio de la noche.

Tras una buena lidia al sexto, que corrió a cargo de José Chacón, y buenos pares de banderillas de Miguel Ángel Sánchez y Vicente Herrera, Parejo se metió a los tendidos en el bolsillo con un inicio en los medios con un cambiado por la espalda, y escuchó los olés más rotundos de la noche en las dos tandas siguientes. Sin embargo, el gaditano buscó inmediatamente las cercanías, bajando el tono de la faena. Se tiró a matar perfecto, y dejó una gran estocada, logrando cortar así la única oreja de la noche.