Suscríbete a
ABC Cultural

Ceret de toros es diferent

Omnipresente en Ceret queda la fusión entre el culto al toro y a la idiosincrasia catalana. Lo dice de forma inequívoca y con orgullo la señal de tráfico al viajero que llega a la ciudad: Ceret de toros

Grave cogida de Espada en una tarde de seria altura de Jiménez

Niños en un encierro simulado en Céret F.Z.

François Zumbiehl

Ceret

Omnipresente en Ceret queda la fusión entre el culto al toro y a la idiosincrasia catalana. Lo dice de forma inequívoca y con orgullo la señal de tráfico al viajero que llega a la ciudad: Ceret de toros. Lo dice la banda de la ... plaza tocando antes del paseíllo Els Segadors, himno solemne escuchado por el público puesto en pie, descubierto, y ovacionado al final. Lo canta y lo baila, entre el quinto y el sexto toro, La Santa Espina, otro himno de amor a la tierra catalana, grave al principio, pero que termina con el toque de palmas y el ritmo alegre de la sardana, en la que entra todo el tendido, rematando con una ovación de triunfo, la misma que brindará a la salida primorosa de un toro con trapío, a la soberbia actuación de un picador, y a los pocos pases que un torero ha llegado a enlazar, venciendo las dificultades del astado. Por si quedara dudas ahí están los areneros enteramente vestidos a la catalana, y ahí está, colocado en lo alto de la plaza de toros, la pancarta con el letrero gigante, Catalans ¡Aficionados! Sobre este lema y sobre el antitaurinismo político al otro lado de la frontera se explica el presidente de la Asociación de Aficionados Ceretanos (ADAC), François Garrigue: «En Ceret la tradición de los juegos taurinos remonta a la Edad Media. Cuando estas tierras catalanas pasaron a pertenecer al reino de Francia en el siglo XVII, por el Tratado de los Pirineos, la afición taurina ha seguido en activo aquí, fuera de España. A lo mejor nuestros vecinos catalanes del sur han hecho fusionar la ideología animalista, de moda, con sus ambiciones políticas, con el riesgo, para conseguir una nación, de cuestionar toda una civilización».

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia