El peor viaje de Boré Buika: «No vamos a morir en Etiopía»

Fue a conocer el país con un amigo, y quisieron hacer aquello de desplazarse como lo haría cualquier persona del país. Cualquiera que no tuviera otra opción, claro está. «Nos advirtieron de que no cogiésemos autobuses de segunda categoría, que nos darían problemas», explica, pero «nosotros queríamos la experiencia completa, la 'full experience'». En seguida se dieron cuenta de que quizás no había sido la mejor de las ideas, pero siguieron con su plan tal y como lo habían diseñado. Así es como los encontramos una madrugada yendo en un autobús que en realidad era «una minifurgoneta llenísima de gente», camino a Arba Minch, «el último pueblo al que llega el transporte público, y a partir de ahí tienes que alquilar un coche» para visitar algunos enclaves del país.

Lleno hasta la bandera, el vehículo era pilotado por un conductor poco fiable: «El tío iba rapidísimo». Pero al parecer no era el único chófer temerario de Etiopía, ya que «mirábamos por las ventanas y de vez en cuando veíamos otras 'minivans' estampadas y quemadas a los lados de la carretera». 'Full experience'.

Buika se puede reír mientras lo cuenta, pero en el momento parecía que el tiempo no pasaba: «Yo veía la cara de mi amigo, que estaba en pánico total, y recuerdo perfectamente mirarle a los ojos, a las cinco de la mañana, a oscuras, yendo a 120 kilómetros por hora por una carretera de mierda, apretadísimos con un montón de gente que no conocíamos de nada, y decirle: 'Hermano, tranquilo, no vamos a morir aquí'». Asegura que eso lo relajó, pero lo cierto es que, mientras el resto de pasajeros «iba hablando tan normal», ellos dos solamente miraban al suelo sin decir ni mú. «Fueron tres horas horribles». El actor admite que «hubo un momento en que me pregunté si no nos habríamos pasado de aventureros: no somos tan guays, ¿por qué no hacemos lo que hace todo el mundo?».

A pesar de las aventuras con el transporte público y los conductores chiflados, el recuerdo del viaje es excelente. «En Etiopía confluyen cosas muy interesantes», asegura, para empezar un resumen hablando del descubrimiento de restos de nuestros ancestros remotos: «Es el país de Lucy, el primer 'homo sapiens sapiens', para mí tiene algo de místico pensar que todos venimos de ahí». Además, es «el único país no colonizado de África, lo que permite tener una percepción de la África que hubiera sido sin colonización, o sin aquella colonización». «Hay cosas que nadie te ha contado que existen en África: hay castillos, dividen el año en trece meses, tienen su propio horario, reyes, iglesias... es un constante impacto cultural y emocional», sentencia.

El actor mallorquín ha presentado recientemente la película 'Hate songs', que recrea el genocidio que sufrió otro país africano, Ruanda, hace justo treinta años, entre abril y julio de 1994. «En cien días murieron un millón de personas, el 75% de las cuales a machete, y nadie habla de esa guerra», lamenta el artista. Presentada en el Festival de Málaga, ahora la cinta está «a la espera de ver si se emite por alguna plataforma de 'streaming', y si se programa en algún festival internacional».

En el ámbito televisivo, lo hemos visto aparecer en series como 'El secreto de Puente Viejo', 'La Mesías' y 'Mar de plástico'. Estas semanas, Boré Buika rueda la serie juvenil 'Mar afuera', para Atresmedia. Está ambientada en un correccional de menores en el que habitan muchachos de procedencias sociales de lo más diverso. «Soy uno de los profesores, ya estoy en esta fase de la vida», se ríe.