De la Copa América al circo en euskera: así son los pagos de Iceta al independentismo

Precisamente, uno de los momentos más incómodos que ha vivido Iceta como ministro fue cuando aprobó el primer pago de esos 20 millones. Lo hizo en mitad de un puente y provocó la protesta de varias ciudades y autonomías de distinto color político, que denunciaron el agravio comparativo. Pasado el chaparrón, Iceta renovó el convenio los dos años siguientes y ya ha repartido 60 millones. A esta partida, consagrada en los últimos presupuestos, se le suman esos 18 millones para la Fundació Barcelona Capital Náutica, con objeto de «fomentar y cofinanciar» la Copa América «como proyecto deportivo de relevancia internacional».

Como informó ayer ABC, el de Cultura y Deporte es el ministerio que más enmiendas ha aprobado en las cuentas del ejercicio actual: Iceta se ha convertido en el pagador del Gobierno Frankenstein al asumir el 32 por ciento de las desviaciones presupuestarias aprobadas por los veintidós ministerios de Pedro Sánchez durante la tramitación parlamentaria de los PGE. En total, 66,9 millones de euros, de los que casi 39 (el 58 por ciento) financiaron una treintena de enmiendas de ERC y PdCAT, los socios catalanes del Ejecutivo, cuyos votos han resultado claves en esta legislatura. Iceta desvió otros 20,2 millones para asumir enmiendas de Bildu y PNV. Teruel Existe le sacó al ministro 6,3 millones y Compromís 1,1.

En dos años, los que Iceta lleva como ministro de Cultura, la desviación presupuestaria vía enmiendas se ha multiplicado por cuarenta. En las cuentas de 2022, el departamento cedió en total 7,2 millones en enmiendas. En 2021 fueron 1,6 millones. Iceta ha presumido estos dos últimos años de contar con los presupuestos más generosos de la serie histórica, pero nunca dijo que el precio a pagar fuera este. Cultura ha dado de baja partidas que consideraba prioritarias –porque unos presupuestos reflejan las líneas maestras de un ministerio– para dar entrada a otros proyectos que no contemplaba, la mayoría dirigidos a fundaciones, ayuntamientos y otras organizaciones catalanas y vascas del ámbito del independentismo y del nacionalismo.

De estas 62 enmiendas, además de la de la Copa América, destaca una de 5 millones para construir un espacio deportivo multifuncional en Santa Coloma de Gramanet. Fue una exigencia de ERC, que en origen llegó a pedir 20 millones para este proyecto. Iceta aceptó además otras cuatro enmiendas, por 4 millones cada una: una de Teruel Existe, dos de Bildu y una de PNV. Tomás Guitarte, único diputado de Teruel Existe, consiguió financiación el proyecto del Museo Nacional de Etnografía en la ciudad. Bildu se aseguró 4 millones para a las obras de restauración del edificio 'La Basconia', en Basauri, y para reparar la pista de atletismo de Larrabide (Pamplona). El PNV logró 4 millones para la restauración del Alto Horno de Sestao.

Si entre 2021 y 2022 la partida más cara que Cultura aceptó introducir en sus previsiones presupuestarias fue una que suponía un desembolso de 1,6 millones, en 2023 once han superado esta cantidad. Dos de ellas, por valor de 3 millones, se destinaron a sufragar la rehabilitación del convento y antiguo colegio de Les Carmelites Missioneres Teresianes de Amposta (ERC) y el plan especial del Ayuntamiento de Eibar para rehabilitar el Área de Murrategi (Bildu). Cultura desvió otros 2,5 millones para que el PDeCAT pudiera anotarse el tanto de la ampliación del auditorio municipal de Tortosa, un municipio de Tarragona con 33.510 habitantes.

Menos cuantiosa, pero igualmente llamativa, fue otra enmienda de ERC por la que el Ejecutivo ha presupuestado 300.000 euros para promover las lenguas autonómicas a través del Institut Ramon Llull, el Etxepare Euskal Institutua y el Instituto da Lingua Galega. También forzado por ERC, Iceta inyectó 200.000 euros a Obra Cultural Balear (OCB) para la promoción del pleno uso de la lengua catalana en las Islas Baleares. El presidente de OCB, un agente político, no ha parado de hacer campaña por el catalán y estos días está presionando para evitar que Vox entre en el Gobierno balear. Bildu ató otros 250.000 euros para un programa de ayudas a empresas privadas para actividades circenses en euskera.

La cantidad de desviaciones presupuestarias admitidas por Iceta poco tienen que ver con esa visión de la cultura como una «política de Estado» que le está reclamando ahora a Feijóo, por aquello de que el líder del PP ha puesto en duda la continuidad de un ministerio propio. Un gasto que pone en duda esta convicción es el que Cultura ha pactado para renovar los interiores en el centro de visitas del Castillo de Amaiur: 250.000 euros reclamados por el PNV para mantener vivo este símbolo político para nacionalistas e independentistas vasco-navarros. No se trata de una improvisación, pues el Gobierno central ya negoció 100.000 euros en 2022 y 300.000 euros en 2021.

En la larga factura que Iceta ha pagado para mantener en pie el Ejecutivo figuran otros gastos como uno de 1 millón para remodelar la zona deportiva del estadio municipal de Vilaseca, una localidad de 22.107 habitantes de Tarragona. Nuevos campos de fútbol, una pista de atletismo, pádel, un edificio de servicios... Lo pide el PDeCAT y el ministerio paga con el dinero de todos. Bildu aprovechó también la debilidad parlamentaria del Gobierno para cobrarse 2 millones que financiarán el proyecto Leku, que pretende dotar al municipio alavés de Llodio, de 18.205 habitantes, de una infraestructura que contará con una sala polivalente para albergar actos culturales, sociales, reuniones o conferencias.

Cultura cedió otras partidas menores para financiar proyectos en Alpicat (Lérida, 6.230 habitantes), en Gandesa (Tarragona, 3.009 habitantes) o Vilasana (Lérida, 717 habitantes). Además, Iceta comprometió a finales del año pasado 200.000 euros de los presupuestos estatales para impulsar las actividades culturales de la Fundación Horitzons 2050, que se presentó en sociedad en abril. ¿Su objetivo? Ayudar a la divulgación cultural y al fortalecimiento de las actividades culturales en el territorio leridano. El presidente de la fundación dijo el día de la presentación que aspiran a que la burguesía «tenga un papel de motor y decisivo que apueste por el conjunto de este territorio y lo haga con miras al conjunto de Cataluña y a todo el mundo».