La oposición estalla por los pagos de Iceta al independentismo: «Han manoseado la política cultural como moneda de cambio»

En una conversación telefónica con este diario, el dirigente del PP lamentó que no ha habido en esta legislatura un proyecto cultural de Estado: «No es normal que haya habido cuatro ministros. Iceta reconoció públicamente que esto de la cultura no le apetecía, que era un ministerio de consuelo. No existe una política cultural identificable. No hay coordinación. La conclusión es que la acción cultural se ve resentida. Tampoco hay un relato evocador ni ambicioso a la hora de apelar a la utilidad de lo inútil. Al contrario, Iceta es un ministro de calmar a los independentistas. Es la cultura como una herramienta al servicio de la estabilidad de España. Que habrá a quien esto le parezca bien... El papel de Iceta ha sido estratégico».

Sobre las críticas que estos días ha hecho el ministro al PP por las dudas que sembró Feijóo sobre la existencia de un Ministerio de Cultura propio si llega a La Moncloa, Sémper dijo que aún no hay nada decidido al respecto: «En el pasado ha habido un Ministerio de Educación y Cultura que ha servido para hacer políticas culturales. Ahora hay un ministerio que no sirve para eso. Independientemente de que haya un Ministerio de Cultura y Deporte, o con algo más, lo que sí va a hacer Feijóo es un programa serio, que proyecte la imagen exterior de España a través de la cultura y la lengua. No puede haber más museos nacionales que cierren o que tengan problemas como goteras. Esta nueva izquierda ha potenciado una cultura absolutamente carcomida por lo políticamente correcto. La creatividad, la exploración de nuevos registros... todo esto ha sido perjudicado en esta legislatura, por mucho que haya un ministro que sea solo de Cultura».

Soledad Cruz-Guzmán, portavoz del PP en la Comisión de Cultura estos últimos cuatro años, denunció por su parte que el reparto territorial del presupuesto de Cultura con Iceta «siempre ha sido injusto», con Andalucía como una de las comunidades más perjudicadas. «Es lamentable que se usen las cuentas para devolver favores. Y no son solo los presupuestos, sino que también se ha cedido en el ámbito ideológico a partidos como Bildu. Todo se ha hecho de forma oscura, de tapadillo. No ha existido ningún debate premio en la Comisión de Cultura. Es un mercadeo. Con la cultura no se puede estar siempre mercadeando», valoró Cruz-Guzmán. José Ramírez del Río, portavoz parlamentario de Cultura de Vox, lamentó que este ámbito «haya sido sacrificado por Sánchez para satisfacer a sus socios independentistas». «Si por algo se ha identificado este Gobierno es por atentar contra todas las señas de identidad de nuestro país, y en este campo no ha sido una excepción, sino la regla -añadió Ramírez del Río-. A pesar de tener un presupuesto alto, no se ha destinado dinero para restaurar monumentos de la lista de Hispania Nostra de patrimonio en riesgo de destrucción. La lista no ha dejado de crecer».

En los sindicatos del Ministerio de Cultura las revelaciones de ABC tampoco han hecho demasiada gracia. UGT, sindicato mayoritario, lamentó que el Gobierno no haya prestado atención al empleo público. «Nos preocupa el déficit en museos, archivos e Inaem. El nivel de externalización ha sido el más alto desde hace años», dijo su portavoz, Javier Figueroa. CSIF, por su parte, enumeró algunas de las actuaciones que Cultura no ha hecho por falta de presupuesto: la retirada del amianto en la sede central del ministerio -solo se ha limpiado una planta, donde Iceta tiene su despacho- y en el edificio del Instituto del Patrimonio Cultural de España. Sobre los daños del archivo Laurent, siguen sin comenzar los trabajos de limpieza masivos de las placas afectadas por la mala climatización; se instalaron inicialmente dos deshumidificadores prestados por la Subdirección General de Museos para la posterior adquisición de equipos definitivos. Y la última: el personal de vigilancia de museos lleva años sin uniformes.