Último cierre de filas en San Sebastián 2016 para salvar «momentos muy críticos»

La imagen, con los portavoces de los grupos municipales posando junto al alcalde, Juan Karlos Izagirre, con camisetas de la Capitalidad, y la aprobación hoy del texto consensuado en el pleno del consistorio no logra sin embargo disipar la fragilidad del acuerdo político en torno a la nefasta gestión .

La declaración, que será aprobada hoy con el apoyo de todos, llama a recuperar el «espíritu originario» de San Sebastián 2016 , que en verano de 2011 salió ganadora para representar a España como Capital Cultural, entre acusaciones de «favoritismos» políticos aireadas por otras finalistas como Córdoba y Zaragoza . Tras esa primera tempestad, hace un año ya que la borrasca se instaló en la capital donostiarra.

A año y medio de que arranque el programa oficial de actos, aún por presentar públicamente, San Sebastián 2016 carece, ni más ni menos, de una dirección general . Las instituciones (Ayuntamiento, Diputación, Gobierno vasco y Ministerio) negocian aún el relevo de Itziar Nogeras, que dimitió tras apenas siete meses en el cargo, al que accedió entre negras sombras de amaño del concurso público.

Nogeras se marchó acusando a las instituciones, especialmente al alcalde de Bildu, de «injerencias políticas» y «deslealtades» hacia ella y el resto del equipo de la Capitalidad . En este grupo se halla ahora, como director provisional y coordinador cultural Xabier Payá , cuya designación fue también polémica por haber posado con una camiseta del asesino de ETA Juan Ignacio De Juana Chaos . Sobre su apoyo al etarra se ha limitado a decir que no esconde «nada», mientras que los partidos, salvo tímida denuncia inicial del PP, optan por mirar para otro lado.

Pese a las reiteradas críticas de los grupos de la oposición a Bildu por haber desvirtuado el proyecto original y dirigido una gestión desastrosa que está manchando el buen nombre de San Sebastián, la coalición radical obtuvo ayer y hoy su recompensa exhibiendo un nuevo cierre de filas público. No es el primero, ya que cuando la polémica designación de Nogeras, las instituciones, incluido el Ministerio, apostaron por guardar la banda.

La declaración institucional asume que el proyecto atraviesa «momentos muy críticos» y apunta a los «problemas para dar estabilidad al equipo técnico directivo y la ausencia de una estrategia informativa y de comunicación, y de búsqueda de ‘sponsors’ y financiación privada». Circunstancias todas ellas que «están lastrando el desarrollo del proyecto cultural», reconocen los partidos políticos.

Pese a todo, se apuesta por no mirar atrás y remar todos juntos hacia adelante : «Ahora más que nunca, tenemos que reivindicar la necesidad de recuperar el espíritu originario de San Sebastián 2016 de ser un proyecto compartido y consensuado entre todas las formaciones políticas y el conjunto de la ciudadanía, por encima de lecturas partidistas y de siglas».