La decisión política del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, de rebajar los impuestos sigue adelante. El conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, precisó que –como adelantó ayer ABC en exclusiva– la Generalitat está estudiando rebajar el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), así como establecer beneficios fiscales para incentivar determinadas actividades que contribuyan a acelerar la recuperación económica.

Moragues dejó claro que los Presupuestos de la Generalitat para 2015 no registrarán una subida de impuestos y tampoco recortes. «El mensaje que queremos trasladar es que estamos estudiado una posible rebaja de impuestos», y destacó la «voluntad» del Gobierno valenciano de «adaptar» la tarifa autonómica del IRPF, tras la rebaja aprobada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy. La medida supondría dejar en el bolsillo de los valencianos hasta 475 euros más cada año.

Los estudios que están desarrollando los técnicos de Hacienda parten de una rebaja del tipo impositivo del tramo estatal que se reduce en su parte máxima del 52% al 45%, mientras que el mínimo baja del 24,75% hasta un 19%. Esto supondría para los contribuyentes valencianos poder disponer de entre 244 y 399 euros más al año. Las autonomías tienen libertad para determinar si bajan su tramo y en qué proporción, o si lo mantienen.

Menos que en Extremadura

Moragues está barajando una reducción que sería de menor calado que la estatal, y también inferior a la que el presidente extremeño, José Antonio Monago, ha aplicado en su propia autonomía.

Las estimaciones más optimistas en el caso de la Comunidad podrían situar ese ahorro favorecido por la rebaja del tramo autonómico entre 25 y 75 euros anuales más. De esta forma, los valencianos podrían disponer de entre 270 y 450 euros anuales más en su bolsillo.

Cabe recordar que a nivel estatal se han aprobado medidas concretas, como que los contribuyentes con un salario de 12.000 euros anuales ya no pagarán IRPF –cuando en 2006 el umbral estaba fijado en 9.000–, lo que afectará a 1.600.000 personas. Mientras, el 72% de los declarantes en España que cobran hasta 24.000 euros al año tendrán una rebaja media del 23,75%.

Otro tipo de actuaciones destacadas en este ámbito impositivo señalan que se aumentan los mínimos familiares hasta un 32% y se incluyen tres nuevas deducciones para familias con hijos dependientes con discapacidad, y también para las familias numerosas.

Merma retardada

El Gobierno valenciano es consciente de que, a pesar de la leve mejoría económica que empieza a apuntarse, una merma de ingresos vía impositiva en estos momentos pondría en peligro la regularidad en el pago a los colectivos con alta sensibilidad social –ayudas públicas, subvenciones, etcétera–. Por este motivo el conseller de Hacienda se inclina por plasmar la rebaja de la presión impositiva en el IRPF, ya que la disminución de ingresos no se acusaría con carácter inmediato. En concreto, ese efecto tardaría en reflejarse hasta dos años.

La merma de ingresos llegaría con la liquidación del año 2015, que el Gobierno de España traslada a la financiación de las Autonomías dos años después.

Alberto Fabra tratará con Juan Carlos Moragues los detalles de esta rebaja durante el fin de semana, y dará cuenta de los detalles –hasta donde se pueda avanzar sin saber todavía con qué ingresos del Estado cuenta para el próximo año– durante el debate de Política General que se celebrará el martes y miércoles de la próxima semana.