Eyaculación precoz

Existen enfermedades que pueden ser causa de la eyaculación precoz como las infecciones de próstata o de uretra. Sin embargo, el 90% de los casos se considera que es por causas psicológicas de modo que apenas el 10% está relacionada con cuestiones anatómicas o fisiológicas .

La ansiedad , la depresión , el estrés o la inseguridad son algunas de las razones psicológicas más habituales. Es precisamente la presión ante el coito lo que hace que se produzca entre los jóvenes y adolescentes. En definitiva, la eyaculación precoz es la pérdida de control sobre la eyaculación de forma que se produce un reflejo que le lleva a la eyaculación y no permite alcanzar el orgasmo en el momento deseado sin permitir disfrutar plenamente de la relación sexual .

Dado que la mayoría de los casos tiene que ver con la presión psicológica, en las relaciones heterosexuales , resulta relevante destacar que el 85% de las mujeres no logran el orgasmo con la penetración mientras que el 100% de las mujeres declaran alcanzar el orgasmo con estimulación de clítoris . Baste el dato para descargar de presión a los hombres que consideren imprescindible una penetración duradera para la satisfacción propia y de su pareja.

En cualquier caso no es algo baladí, por lo que quitar importancia no es la solución. Eso sí, la culpa es algo que debe quedar absolutamente fuera de la discusión. La comprensión y el diálogo son imprescindibles ya que intentar hacer maniobras para ayudar solo empeorará la situación. Acudir a la ayuda profesional es el mejor consejo, en primer lugar para descartar posibles infecciones o patologías y en segundo lugar para reconocer las razones de la eyaculación precoz y tratarlas adecuadamente.

Los hombres son mucho más reticentes a buscar ayuda profesional en las cuestiones que tiene que ver con su virilidad ya que se les ha presupuesto infalibles, lo que aumenta aún más la tensión, por lo que insistir en la ayuda profesional es la mejor opción.