Sudar o no sudar con el ejercicio: ¿Está más en forma quien más lo hace?

Uno de los contextos a los que más asociamos el sudor es el deporte. Por ello, es fácil pensar que, a más sudor, más afectivo es el ejercicio que estamos realizando. Pero esto no es así. Alfonso M. Arce, colaborador de ABC Bienestar y autor del blog 'Que la fuerza te acompañe' , desmitifica esta idea, pues explica que el sudor es una respuesta de nuestro organismo al calor. ¿Esto qué quiere decir? Que podemos sudar y mucho sin estar realizando ningún tipo de ejercicio físico. Y hacer mucho ejercicio y sudar poco. «El mismo ejercicio con una temperatura ambiente distinta puede conseguir que acabes con tu camiseta empapada o que a duras penas hayas empezado a sudar», explica Alfonso M. Arce, que añade que y eso «no quiere decir que en un caso el ejercicio sea más efectivo que en el otro».

Además, comenta el entrenador personal Ángel Carmona (@musclewinner) que hay que tener otros factores en cuenta, como el sexo («los hombres sudan más que las mujeres»), la edad ( «los jóvenes sudan más que los mayores» ), y la humedad del sitio donde se hace ejercicio.

Para saber si realmente el ejercicio que hacemos es efectivo o no, Ángel Carmona explica que debemos tener en cuenta tres factores esenciales: la práctica deportiva continua, el descanso nocturno y la alimentación equilibrada. Aun así, indica Alfonso M. Arce que la sudoración sí puede ser indicador de la intensidad del ejercicio que realicemos: «Cuanto más exigente sea un entrenamiento mayor sudoración producirá». Aunque explica que hay quienes sudan más que otros, es realmente complicado no sudar nada haciendo ejercicio. «Si no sudas lo más mínimo, es un indicador de que estás trabajando en un nivel de intensidad que a duras penas conseguirá ninguna adaptación», indica.

¿Y es bueno sudar? Ambos expertos señalan que la función principal del sudor es la termorregulación del cuerpo , por lo que ese sería su mayor beneficio. «Clásicamente se ha creído que el sudor, además de regular la temperatura corporal es uno de los mecanismos de excreción que tiene nuestro organismo», cuenta Ángel Carmona, que especifica que, en realidad, en composición del sudor es en su casi totalidad agua (95-99%). «La cantidad de toxinas eliminadas por el sudor es mínima e insignificante, por lo que la idea de que puedes sudar hasta eliminar las toxinas de tu cuerpo es solo un mito», asegura el entrenador.

Por otro lado, Alfonso M. Arce explica que sudar más no es sinónimo de quemar más calorías . «Lo que hemos eliminado sudando se recupera casi de inmediato bebiendo», asegura. Explica entonces que, lo que ocurre ante un ejercicio muy intenso es que el cuerpo necesitará más sudoración para combatir ese 'calentón' que le estamos ocasionando; es ahí donde se está produciendo la quema de calorías. «Por utilizar un símil: el sudor lo que hace es intentar apagar el incendio, pero el gasto calórico principal no está en el sudor», termina.