Spinning

El spinning es un ejercicio aeróbico que se realiza sobre una bicicleta estática especial ya que posee un disco de inercia que hace que la rueda siga moviéndose aunque no se esté pedaleando logrando un movimiento más natural. Además, incluye dispositivos para modificar la resistencia. En las sesiones de spinning, que tienen una duración media de 45 minutos, se trabaja sobre todo el tren inferior, es decir, las piernas y los glúteos . Sin embargo, también se trabajan otros músculos como los dorsales, los lumbares o el trapecio así como los bíceps y los tríceps. Además, si mantienes una buena postura, también se tonifican los abdominales.

Se trata de un ejercicio que puede realizar cualquier persona debido a que se puede adaptar de forma individual tanto el ritmo como la resistencia siguiendo las pautas que da el monitor y que están marcadas por la música que acompaña a cada sesión.

Precisamente es importante prestar atención a la intensidad tanto por defecto como por exceso ya que en el primer caso no se conseguirán los resultados esperados y en el segundo, puede acarrear problemas de salud irreversibles.

Además de a la intensidad hay que prestar especial atención a la postura . Para ello hay que colocar el sillín y el manillar a la altura y distancia adecuada para cada persona. Con el cuerpo alineado, las rodillas no deben flexionar más de 45 grados en el pedaleo ni pueden quedar completamente estiradas en ningún momento. El tobillo debe acompañar el movimiento del pedaleo y la zona lumbar también ha de mantener una posición de 45 grados en relación al manubrio. El cuerpo debe mantenerse alineado y la espalda y los hombros relajados.

Una buena hidratación es imprescindible para aprovechar todos los beneficios del spinning sin riesgos.