«Una alteración de la microbiota induce a un proceso de inflamación»

Esas bacterias, hongos, protozoos, virus y otro tipo de microorganismos que conviven en nuestro cuerpo son imprescindibles para que se produzcan funciones tan importantes como la maduración del aparato digestivo , el entrenamiento del sistema inmunitario , la generación de sustancias que afectan a la respuesta corporal ante un peligro o el desarrollo del sistema nervioso central . Sin embargo, para comprender las verdaderas causas que están detrás de las alteraciones de la salud conviene entender el contexto de la persona y no solo la composición de la microbiota o los síntomas que pueda estar sufriendo. Por eso el cofundador de Regenera , Xavi Cañellas, defiende la necesidad de entender desde la psiconeuroinmunología cómo puede la biografía de una persona alterar su biología.

¿Por qué está relacionada la composición de la microbiota con el desarrollo de enfermedades como la obesidad y la diabetes tipo 2?

Así lo muestran las diferentes investigaciones desde hace aproximadamente 15 años, primero en modelos animales y actualmente ya en humanos. Sabemos que los microorganismos comandan la expresión de ciertos péptidos que regulan hormonas como el glucagón y la insulina. Estas hormonas son claves en el metabolismo de la glucosa y del tejido adiposo . Además, una alteración de la microbiota provoca una respuesta del sistema inmunitario que induce a un proceso de inflamación y, esta inflamación es capaz de alterar también el metabolismo de la glucosa y de la insulina promoviendo patología como la obesidad y la diabetes tipo 2.

¿Qué características tiene la microbiota de las personas que sufren obesidad?

Ahora empezamos a conocer el patrón microbiano en las alteraciones metabólicas. Aunque la marca de la microbiota es individual en cada persona, sí se establecen algunas características generales en personas con obesidad como son el aumento de algunos filos bacterianos como los firmicutes y proteobacterias y disminución de otros filos como los bacteroidetes y verrucomicrobias . En sí, un patrón más inflamatorio induciendo a alteraciones metabólicas e inmunitarias como comentaba anteriormente.

¿Qué intervenciones y estrategias terapéuticas se llevan a cabo para mejorar la composición de la microbiota?

Antes de nada, debemos contextualizar la clínica que presenta una persona con su perfil microbiano y su contexto de vida. De nada sirve mirar microbios sin entenderlos dentro de un organismo humano. De hecho, el ser humano tiene más bacterias que células humanas y aproximadamente 100 veces más genes microbianos que humanos. Somos literalmente, más microbio que humano y convivimos en el juego de la vida. Cuando analizamos a cada persona y su alteración microbiana , debemos comprender qué causas han generado el desorden y aplicar vías de tratamiento acordes a la individualización de cada caso. Eso puede implicar la modificación de la alimentación , entendiendo qué alimentos son necesarios para alimentar a algunas colonias bacterianas en concreto; la regulación del descanso ; la prescripción de ejercicio físico ; la toma de algún suplemento como un probiótico específico y el abordaje del sistema nervioso ya que ahora sabemos que las alteraciones por estrés modifican de forma importantísima la composición microbiana.

¿De qué manera se puede prevenir la obesidad a través del cuidado de la microbiota?

Y diría más, no solo de la obesidad, sino de cualquier patología y disfunción. Cada vez sabemos más que la microbiota está detrás del buen funcionamiento del cuerpo humano y también de todas la enfermedades estudiadas. Cuidar de la microbiota es cuidar de nosotros mismos. Los resultados de los estudios en cómo mejoramos los humanos cuidando nuestros hábitos de vida , son los mismos resultados positivos cuando miramos estos hábitos y el impacto de la microbiota. Respecto a la obesidad, es obvio que el cuidado de la alimentación es importantísimo y por supuesto, la alimentación basada en la individualización del caso y de su microbiota. Sin olvidar el ejercicio físico ya que sabemos que la práctica del deporte aumenta la diversidad microbiana, un sello clave en la regulación de la salud.

Usted es experto en psiconeuroinmunología clínica, ¿podría detallarnos en qué consiste esta disciplina?

Es la rama de la ciencia que estudia la comunicación entre los diferentes sistemas corporales. El cuerpo humano se comunica constantemente por diferentes vías moleculares. La psiconeuroinmunología (PNI) estudia estas vías y cómo se alteran en el contexto de la vida de una persona. De forma resumida, cómo la biografía de una persona altera su biología. De esta manera podemos comprender las verdaderas causas de las alteraciones de la salud que sufren las personas y no solo hablar de síntomas o etiquetas. No existen depresiones sino que hay personas que sufren depresión.

¿De qué manera se integra desde la psiconeuroinmunología clínica las diferentes herramientas como la nutrición desde un punto de vista evolutivo, el ejercicio físico funcional, la terapia emocional y la comprensión de la fisiopatología de los trastornos de salud?

La parte más importante es el enfoque de la psiconeuroinmunología a la hora de tratar y ayudar a los pacientes que vienen a la consulta. Es así cómo podemos comprender las verdaderas causas de los problemas de salud de las personas encajándolos con sus propias vidas. Es así como, después, en el terreno de las herramientas, se puede individualizar cada caso y recurrir a la estrategia idónea para cada paciente. Alimentación personalizada , individualización en la pauta de ejercicio físico y las diferentes visiones de cómo abordar la parte emocional serán aplicadas en el momento justo para inducir los cambios necesarios.

¿Cuáles son las señales que indican que tenemos una microbiota dañada?

Ahora sabemos que la microbiota está implicada en el funcionamiento de todos los sistemas corporales. De hecho, están descritas más de 20.000 funciones de la microbiota . Por tanto, cualquier alteración de la salud es muy probable que esté afectada. Los síntomas más comunes son todos los desajustes del aparato digestivo, de la piel, del metabolismo de la glucosa, de las hormonas sexuales, de las hormonas tiroideas e incluso del estado de ansiedad.

¿Qué alimentación provoca más daños en la microbiota?

Lo que llamamos alimentación disbiótica , es decir, todo tipo de productos procesados y ultraprocesados, alcohol y cada vez sabemos más sobre el potencial disruptor e inflamatorio de la mayoría de los cereales y productos lácteos.

¿Y cuáles son los hábitos que perjudican más la microbiota?

Los mismos que afectan negativamente a la parte humana: el tipo de alimentación inflamatoria, comer muchas veces al día, alterar el sueño, el sedentarismo y por supuesto y por encima de todo, los niveles de estrés prolongado.

Recientemente Regenera ha lanzado un postgrado online de Microbiota para dar a conocer en profundidad el mundo de los microbios y llevar este conocimiento a la práctica clínica diaria. Según explica Cañellas, actualmente hay un gran conocimiento de la microbiota pero poco útil porque no se traslada al contexto del día a día. Y eso es lo que les ha llevado a intentar trasladar el conocimiento científico a la vida de las personas. Algunas de las claves que se desarrollan en el postgrado, que ya cuenta con más de 20.000 alumnos inscritos, son: interpretar tests específicos, conocer la alimentación individualizada para los microorganismos, aprender cuál es el papel de los microorganismos en la relación con el cerebro y en las enfermedades neurodegenerativas, y cuál es la relación de la microbiota con el sistema inmunitario.