«No os quedéis callados cuando diga que somos iguales». Con estas palabras ha inaugurado Susana Díaz el Congreso Extraordinario del PSOE que se celebra este fin de semana en el Hotel Auditórium de Madrid, del que ella es presidenta.

La líder de la Junta de Andalucía ha pedido a los delegados y socialistas que reivindiquen «la oportunidad de ser lo que somos: la alternativa de izquierdas». La presidenta de la Junta de Andalucía ha hecho una referencia velada en su discurso a los nuevos partidos de izquierdas, a los que ha pedido que no se equivoquen de adversario. También ha afirmado que los que ponen trabas a los socialistas «le están abriendo la puerta a la derecha».

Tras besar a Alfredo Pérez Rubalcaba y José Antonio Griñán, Susana Díaz ha comenzado su discurso acordándose de las víctimas del conflicto de Gaza y pidiendo el fin de la violencia. La idea de que el PSOE «es un partido que es la referencia de la izquierda» se ha apoderado pronto del discurso de la andaluza. Ha reprochado al PP que esté «desmantelando la sanidad pública» y la educación.

En referencia a la bajada histórica del paro que comunicó esta semana el Gobierno de Rajoy, Susana Díaz (sin mencionar este dato concreto) ha declarado que «esa España que desprende triunfalismo» llega a ser «insultante». La andaluza ha vuelto a reconocer los errores del pasado, pero ha insistido en que «hoy España es mas injusta que la que dejaron los anteriores gobiernos socialistas».

Un homenaje a Rubalcaba

Susana Díaz también ha rendido un homenaje a Pérez Rubalcaba, quien «ha dirigido el partido en un momento difícil y complicado». Tras sus palabras, todos los presentes han dedicado un sonoro aplauso a Rubalcaba, que saludaba sereno desde su asiento. Para Pedro Sánchez, Díaz ha tenido también unas palabras, advirtiéndole que tiene «un camino difícil».

«Queremos una España que no se rompa», ha dicho Susana Díaz dirigiéndose directamente al PSC, del que ha afirmado que tiene «un especial cariño a sus compañeros». La líder andaluza ha dicho que deben trabajar por una «España atractiva» de la que nadie desee irse.

La presidenta del Congreso

Susana Díaz ha inaugurado el Congreso como presidenta. Ambos dirigentes han mantenido un estrecho contacto desde que Sánchez ganó las primarias el pasado 13 de julio. Durante los primeros días, Pedro Sánchez se ha reunido hasta en dos ocasiones con la líder andaluza. La primera, durante la ronda de contactos que el nuevo líder socialista ha mantenido con los barones.

Andalucía es una de las federaciones más poderosas del PSOE y esto se ha hecho notar en el reparto de cargos. Micaela Navarro, hasta ese momento presidenta del PSOE de Andalucía, asumirá la presidencia del PSOE, un cargo con poco poder de mando pero con mucho simbolismo. Por otro lado, el diputado andaluz Antonio Pradasserá el secretario de política federal en la Ejecutiva.