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El Vaticano cambió el protocolo horas antes del funeral y Trump se colocó en primera fila

El presidente ucraniano Volodímir Zelenski se sentó a poca distancia del norteamericano

Editorial: Reconocimiento universal

Rouco Varela, cardenal y arzobispo emérito de Madrid: «Pido que quien suceda a Francisco continúe la tradición de los papas»

efe
Ángel Gómez Fuentes

Ángel Gómez Fuentes

Corresponsal en Roma

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Hubo cambios de última hora en el funeral del Papa Francisco en los asientos de los líderes mundiales. Contrariamente a lo previsto, el presidente estadounidense Donald Trump y su esposa Melania ocuparon un asiento en primera fila. A la derecha del mandatario estadounidense estaba el presidente finlandés, Alexander Stubb, con el inquilino del Elíseo, Emmanuel Macron, y su esposa Brigitte a su lado; a la izquierda, el presidente estonio, Alar Karis, junto a Felipe VI. Asiento en primera fila también para el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, sentado un poco más lejos de Trump.

Hay una explicación para ese cambio de protocolo. Los presidentes Donald Trump y Volodímir Zelenski mantuvieron un breve pero significativo encuentro en la Basílica de San Pedro, previo a los funerales del Papa Francisco. Según la Casa Blanca fue «muy productivo» y duró unos 15 minutos. Tras rendir homenaje al Papa, Trump se reunió con Zelenski dentro la Basílica. Luego, salieron a la plaza uno tras otro, acompañados por sus esposas, Melania y Olena. El presidente ucraniano, vestido de negro, en lugar de su habitual uniforme militar, fue aplaudido por la multitud en la plaza de San Pedro. Al terminar el funeral, los presidentes Trump y Zelenki, y sus acompañantes, fueron los primeros en abandonar sus asientos.

Zelenski y Trump se vieron también brevemente dentro de la basílica de San Pedro con el presidente francés Emanuel Macron y el primer ministro británico Starmer. Este último se reunió también anoche durante media hora con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. Las gestiones diplomáticas, en las que intervino especialmente Starmer, condujeron a la programación del encuentro Trump-Zelenski y al cambio del protocolo para sus asientos en el funeral del papa Francisco. Un cambio motivado por ser prácticamente los últimos en llegar y los primeros en marcharse.

El orden para las delegaciones se rige por un estricto protocolo que da prioridad a los soberanos (empezando por los de los países católicos), seguidos de los jefes de Estado y de gobierno, en orden alfabético de los países francófonos, con la excepción de Trump y Zelenski. En la primera fila, a la izquierda del féretro, se encontraba la delegación italiana, encabezada por el presidente de la República, Sergio Mattarella, con su hija Laura, la primera ministra, Giorgia Meloni, y los presidentes del Senado y la Cámara, Ignazio La Russa y Lorenzo Fontana, el presidente del Tribunal Constitucional, Giovanni Amoroso, y el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani. Inmediatamente después, ocupó su lugar el presidente argentino, Javier Milei, acompañado de su hermana Karina, secretaria de la Presidencia.

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