La polémica de un un jinete con su caballo paseando por el carril bici de camino a la Feria de Sevilla

En el metro, la situación fue similar con 175.380 viajeros, a lo que hay que añadirle el uso masivo de los aparcamientos de feria.

Además, a la abundante cantidad de gente que ha paseado y continúa paseando durante el día por el Real, hay que sumarle el tradicional y diario Paseo de Caballos y Enganches, donde se citan ejemplares equinos y unos 1.400 enganches que abandonan el recinto a las 20,00 horas.

Por lo tanto, el acceso y llegada al Real se ha convertido en una Odisea y algunos caballos han optado por llegar al recinto a través del Carril Bici. Así se ha podido ver durante estos días de feria por el barrio de los Bermejales.

El carril bici, tal y como recoge la Dirección General de Tráfico (DGT), es una vía señalizada y acondicionada «específicamente para la circulación de bicicletas, con la señalización horizontal y vertical correspondiente». Por lo que, la circulación con caballos no está permitida, ya que, entre otros aspectos, pone en riesgo la seguridad vial.

De hecho, si se revisa la Ordenanza Municipal del Ayuntamiento de Sevilla sobre circulación de los jinetes a caballo y vehículos de tracción animal, en el artículo 85 establece que «los jinetes a caballo y vehículos de tracción animal deben circular siempre por la calzada arrimadas a su derecha, al paso y conducidas, sujetas o montadas».

A lo que añade, que «el conductor pueda siempre dirigirlas y dominarlas, quedando prohibida cualquier conducta negligente o temeraria». Cabe recordar que en la capital hispalense, los coches de caballos son un medio de transporte que se usa durante todo el año.

Siguiendo con la regulación del ayuntamiento sevillano, los caballos y coches de caballo se consideran un vehículo (Anexo I, Definiciones), por lo que hay que consultar el artículo 145 bis sobre infracciones y sanciones a las normas reguladoras de Vehículos de Movilidad Personal.

Este establece que, circular por zonas no permitidas es una falta grave y que se sancionará con una multa de 101 a 200 euros.

En el año 2011, se inició un procedimiento sancionador en Cantabria a dos jinetes por hacer uso del carril bici. Los clavos de las herraduras causaron daños sobre la calzada.

Además, en la la red social X (antes twitter), muchos usuarios de distintos puntos de España se quejan de los excrementos que dejan estos animales sobre el carril bici.

Una práctica que impide a los ciclistas y, en los casos que se especifiquen, a los peatones disfrutar del uso exclusivo de estas vías.