Cox deja en un mes uno de los dos edificios que ocupa en Palmas Altas y prepara su marcha en un año

La compañía que preside Enrique Riquelme utiliza actualmente dos edificios, los denominados C y D, y durante las fiestas navideñas dejará libre el C para que la Junta pueda seguir con las obras y se concentrará en el D como confirman a ABC fuentes de la Consejería de Justicia que es la propietaria del complejo y de la propia empresa. La intención de Cox es permanecer en este enclave, donde está el domicilio social del grupo, hasta finales de diciembre de 2026, que es cuando expira la prórroga del contrato de alquiler.

De esta forma la Junta podrá cumplir el calendario de reformas, que fue la primera condición que le puso a la energética para mantenerla como inquilina. Esa planificación da todavía margen para prolongar el arrendamiento un año más y llevarlo hasta diciembre de 2027, aunque las fuentes consultadas señalan que «no es la intención».

La búsqueda de Cox de unas oficinas para ubicar al equipo, que supera el millar de empleados, ha resultado difícil por la falta de espacios disponibles en la ciudad. Quedarse en el casco urbano de la capital es uno de los requisitos imprescindibles y que la sede tenga también una buena ubicación. Necesitan de una superficie de entre 10.000 y 11.000 metros cuadrados adaptada a sus necesidades.

De toda la oferta libre que quedaba en Sevilla, la compañía estudió dos alternativas: el solar de las Banderas de la Expo 92 a la entrada de la isla de la Cartuja y el Distrito Portuario. Ha sido este último el que ha resultado más atractivo por el avance en la tramitación y las características que posee. La parcela del parque tecnológico tiene algunos problemas pendientes de resolver tanto administrativos como de instalaciones eléctricas, antes de acoger cualquier tipo de proyecto.

Para ver sus posibilidades, la multinacional ha presentado en la Gerencia de Urbanismo un estudio de detalle para ocupar un cuerpo de naves al que se le podría añadir uno de los tinglados portuarios. Eso supone una edificabilidad de más de 10.000 metros cuadrados en varios de los almacenes regionalistas. Es el mismo espacio que ya tiene reservada la Cámara de Comercio de Sevilla que quiere llevar allí la ampliación del campus universitario de Eusa.

La ocupación de las naves del 29 se llevarán a cabo en régimen de concesión administrativa por un plazo máximo de 50 años, que es lo que contempla la ley en este tipo de activos. Todas las construcciones situadas junto al muelle están afectadas por el dominio público portuario y, por tanto, no se pueden vender. La intención del Puerto de Sevilla, que se convertiría en el nuevo casero de Cox si se termina firmando este acuerdo, es que los operadores se hagan cargo de la reforma en base al plan maestro diseñado por el estudio de arquitectura Eddea para transformar el muelle de Tablada en un nuevo espacio de ocio y oficinas para la ciudad.

El cambio de sede era una prioridad para el presidente de la compañía, Enrique Riquelme, como admitió en un encuentro con la prensa tras la primera junta de accionistas celebrada en Palmas Altas el pasado mes de mayo. En ese encuentro lamentó lo caro que estaba resultando el alquiler y su intención de permanecer sólo un año más en las antiguas oficinas de Abengoa, curiosamente las que levantó la empresa que él mismo terminó absorbiendo.

La dificultad para encontrar unas instalaciones adecuadas es lo que ha provocado una nueva prórroga del contrato hasta diciembre de 2026 y, dada la lentitud administrativa para determinados proyectos, es posible que tenga que hacer uso de ese mecanismo que aporta la Ley de Arrendamientos para permanecer allí durante más tiempo.