El Ayuntamiento de Sevilla considera «un éxito» la organización de Vive Park

De hecho, el Ayuntamiento se puso a disposición de los empresarios feriantes para ampliar algunos días más la estancia de Vive Park en Sevilla en caso de que fuera necesaria. Sin embargo, el buen funcionamiento del modelo ha permitido que adquirieran nuevos compromisos en otras ciudades de Andalucía y que de hecho inicien ya mañana su traslado a la siguiente ubicación.

«Hay que destacar la colaboración entre el Ayuntamiento y la Asociación de Industriales Feriantes de Andalucía, Ceuta y Melilla para haber sacado adelante un parque de atracciones seguro, aforado y que ha cumplido en todo momento con las medidas de seguridad en higiene indicadas en la normativa para paliar los efectos de la COVID-19, adaptándose según cambiaba la normativa de la autoridad sanitaria», explica Juan Carlos Cabrera.

Para posibilitar el desarrollo de esta iniciativa, el Ayuntamiento de Sevilla cedió de f orma gratuita los 86.000 metros cuadros de superficie con la que cuenta el parque y, además, la Delegación de Gobernación y Fiestas Mayores colaboró en el rediseño de la distribución de las atracciones respecto a cómo se organiza cuando se celebra la Feria.

Para ello, se llevó a cabo la apertura de avenidas en el interior del recinto y la separación de todas las atracciones, con el objetivo de ampliar la distancia de seguridad. Además, el Ayuntamiento de Sevilla también cedió un espacio para las caravanas donde viven los feriantes, a la vez que dotó al parque de servicios como limpieza, agua y seguridad.

La celebración de este evento, que ha contado con la asistencia de miles de visitantes , ha permitido reactivar un sector que llevaba 18 meses sin poder desarrollar su actividad, una situación y que se ha puesto en marcha de nuevo de cara al periodo en el que se habría celebrado la Feria de Abril.

Cabe destacar, además, la parte solidaria de esta iniciativa, ya que los industriales feriantes establecieron un día de la semana para colaborar con colectivos sociales que, por falta de recursos, no pueden visitar el parque o que cuentan con especial dificultad para acudir al mismo, fijando también un horario especial para los mismos.