Juanma Moreno, sobre el caso de Sandra: «Un niño que participa en el bullying no debería tener acceso a redes hasta los 18»

Tras trasladar primeramente el pésame y la consternación por lo sucedido, el presidente andaluz manifestaba una reflexión sobre la responsabilidad que deben tener las autoridades y las empresas de redes sociales para el control de las conductas de bullying. «Cualquier niño que participa en un bullying no debería tener derecho a participar en redes sociales hasta los 18 años», señaló en primera instancia, para después refrendar que sería «partidario de, por un lado, cumplir a rajatabla los protocolos», y, por otro, «a las grandes compañías de redes sociales que limitaran los insultos entre los menores. Las autoridades europeas deberían actuar».

Juanma Moreno lamentaba que «desgraciadamente el bullying es un fenómeno que ha llegado a los centros educativos y hay que combatir. La Fiscalía está comprobando lo ocurrido». En la línea con lo manifestado por la Consejería de Educación sobre las medidas que se puedan tomar contra el centro educativo en el caso de detectarse graves anomalías en la actuación del caso de Sandra, el presidente de la Junta comentaba que «todo está encima de la mesa. En un colegio público actuamos directamente y se le cesa. En este caso no está en nuestro ámbito. Se está investigando y, si el colegio no cumple o no ha cumplido, se le podría retirar el concierto».

La Fiscalía de Sevilla ha anunciado este martes que ha pedido, a través de la especialidad de Criminalidad Informática, a una red social la retirada de las imágenes de tres menores que las identifica como supuestas acosadoras de Sandra. Asimismo, el Ministerio Público ha expresado en una nota que también ha abierto diligencias de investigación penal por la difusión en redes sociales de las fotografías con su identidad y con mensajes de amenazas.

Por su parte, el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, aseveraba también que la Policía Nacional está realizando un trabajo de «custodia y vigilancia» para evitar «situaciones no deseables» en el entorno del centro educativo en el que estudiaba Sandra Peña. En declaraciones a los medios, Fernández ha confirmado que la investigación continúa abierta y ha pedido el «máximo respeto» al trabajo de la Policía y la Fiscalía de Menores en la investigación del caso. Asimismo, ha destacado que el papel del teléfono móvil en el proceso es «importante».

Cabe recordar que el caso de Sandra saltó a la luz pública el pasado martes 14 de octubre cuando se precipitó desde el edificio de su domicilio. Los padres de la niña denunciaron entonces que su hija sufría acoso escolar y que el colegio no había actuado en consecuencia, lo que propició que la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía iniciase un expediente para recabar los datos.

Tras la inspección, Educación derivó el caso a la Fiscalía y abrió un expediente administrativo para depurar responsabilidades en el caso de esta chica que sufría bullying por parte de al menos tres compañeras del centro las Irlandesas de Loreto de Sevilla, un caso que ha propiciado la aparición de pintadas en sus muros. La propia consejería ha advertido que el colegio podría perder el concierto que tiene con la Junta si se demuestra un incumplimiento muy grave en el centro a la hora de afrontar este caso de acoso. La familia de Sandra, por su parte, está estudiando presentar una demanda en los juzgados, algo que está valorando junto a los asesores legales con los que está trabajando.

El colegio emitió un comunicado este lunes en el que pedía «cautela y responsabilidad» hasta que se esclarezcan los hechos, pensando sobre todo en que el centro «cuenta con 50 profesionales y 760 alumnos y alumnas» y que «nuestra obligación es protegerlos de comentarios y situaciones que pueden ser altamente perjudiciales para ellos».