Cristiano Ronaldo iguala a Platini, Van Basten y Cruyff con su tercer Balón de Oro

No es un secreto que Cristiano, con ese indisimulado objetivo del gol por encima de todo, busca un lugar en la historia . No le hacía falta este galardón para ganarse ese lugar, más con lo desprestigiados que empiezan a estar estos galardones. Un sentimiento que es fruto del aburrimiento, tal vez envidia y disconformidad, de quienes asisten impotentes al dominio indiscutible de Cristiano y Messi sobre el fútbol mundial en los últimos años. [ Así te hemos contado el sorteo en directo ]

Pero el caso es que estos galardones, más desde que el Balón de Oro se universalizó y abrió las puertas de Europa, son un buen termómetro para que las generaciones futuras analicen el fútbol de nuestros días y pretenda establecer comparaciones con otras épocas.

Con Lionel Messi en el horizonte y sus cuatro balones de oro consecutivos (2009,2010,2011 y 2012) Cristiano Ronaldo empieza a nivelar la batalla. Las lágrimas que derramó el año pasado cuando ganó su segundo entorchado reflejaban todo el sufrimiento de cuatro años sometido a Messi. En esos años el debate sobre quién era el mejor del mundo parecía carecer de sentido. Los dos últimos años han enchufado a Cristiano y la pugna con el argentino está más viva que nunca.

El portugués iguala a jugadores distinguidos y con el reconocimiento universal. Johan Cruyff logró su primer Balón de Oro en 1971, cuando todavía militaba en el Ajax. En 1973 y 1974, ya en el FC. Barcelona, el holandés se convirtió en el primer jugador en lograr su tercera distinción.

Protagonista de esta edición por expresar desde su posición de presidente de la UEFA su opinión sobre los candidatos de este año, Michel Platini llevó a la Juventus a su mejor momento histórico con la victoria en la Liga de Campeones 1984/1985. El francés, que como centrocampista fue el máximo goleador de esa edición, dominaba el fútbol europeo en aquellos tiempos. Fue el primero en ganar el Balón de Oro durante tres ediciones consecutivas.

Muy diferente habría sido el glorioso Milán de finales de los 80 y primeros 90 si no hubiera tenido en la delantera a Marco Van Basten . El genial delantero holandés, que combinó como ninguno la corpulencia y la calidad, la potencia y la técnica, ganó el Balón de Oro en 1988, 1989 y 1992.

A la vez que Cristiano ingresa en este selecto club, deja atrás otro cuyos integrantes también brillan con luz propia. Es el club de aquellos que ganaron el Balón de Oro en dos ocasiones: Alfredo Di Stéfano (1957 y 1959), Franz Beckenbauer (1972 y 1976), Ronaldo Nazario (1997 y 2002), Kevin Keegan (1978 y 1979) y Karl Heinz Rummeigge (1980 y 1981).