Suscribete a
ABC Premium

La Tercera

Contra el nacionalismo

El nacionalismo, en sus múltiples variantes y formulaciones, ha condicionado y sigue condicionando, en España, la política y la sociedad

En Roma no hay vuelta atrás

El León sosegado

Nieto

Jordi Canal

La cuestión nacional y los nacionalismos constituyen el mayor y más persistente problema de España. Del proceso de nacionalización del Ochocientos, en torno a una ampliamente reconocida nación española, se pasó, a finales del siglo XIX y principios de la centuria siguiente, a una pugna ... entre esta nación y las naciones que estaban intentando construir o inventar los nacionalismos alternativos o periféricos, en especial el catalán y el vasco, pero también el gallego. Esta tensión recorrió el Novecientos. Todos los gobiernos y regímenes buscaron soluciones para dicho asunto: desde los estatutos republicanos hasta el Estado de las autonomías, sin olvidar la represión de los nacionalismos subestatales llevada a cabo por el nacionalismo español de la dictaduras de Primo de Rivera y de Franco. El Estado de las autonomías y los generosos autogobiernos regionales parecieron solventar el problema. A pesar de la continuada presión de los nacionalismos catalán y vasco –sin olvidar la terrible ofensiva de ETA contra la democracia y el autonomismo–, el régimen parecía sólido. Era una ilusión. Los desafíos independentistas del siglo XXI, en especial el 'procés' y sus actuales corolarios, obligan a repensar el modelo.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia