La factura de la crisis eléctrica
Las rebajas fiscales para frenar el recibo de la luz 'se comen' la subida de impuestos de Sánchez
Los ingresos extra generados por el ambicioso paquete fiscal pactado por el presidente y Pablo Iglesias en los Presupuestos de 2021 ni siquiera alcanzan para sufragar las medidas de alivio por la subida de la electricidad
El Gobierno se ha dejado ya 1.336 millones de euros de las arcas públicas en intentar amortiguar a base de rebajas fiscales el impacto sobre el recibo de la luz de los consumidores de la imparable escalada de los precios de la electricidad ... en los mercados mayoristas, según admite el Ministerio de Hacienda en el informe mensual de recaudación correspondiente al mes de noviembre que acaba de publicar la Agencia Tributaria.
La cifra, que empezó a contabilizarse el pasado mes de agosto cuando ya fue perceptible en la recaudación el impacto de la rebaja del IVA del recibo del 21% al 10% aprobada en junio, coincide de forma casi exacta con los 1.338 millones de euros extra que el Gobierno ha conseguido sacar en los once primeros meses del año de su ambicioso paquete de medidas para impulsar la recaudación fiscal en España, en el que se incluyen entre otros los nuevos impuestos sobre las transacciones financieras –más conocido como tasa Tobin- y sobre determinados servicios digitales –la no menos célebre tasa Google–.
La evolución observada hasta ahora permite adivinar que al cierre del año la factura de las medidas fiscales destinadas a rebajar el precio del recibo de la luz desbordará o como mínimo absorberá los nuevos ingresos aportados por el paquete de medidas fiscales del Gobierno y convertirá en papel mojado el plan de Hacienda para acortar la supuesta brecha fiscal que nos separa de Europa.
El asunto puede convertirse en un problema para el presupuesto de ingresos del próximo año. El Gobierno acaba de prorrogar hasta el 30 de abril el paquete de medidas fiscales de alivio para los consumidores ante la persistencia de los elevados precios de la luz y el año que viene ya no habrá nuevas medidas fiscales para compensar el gravoso coste extra de ese paquete fiscal, que el Ministerio de Hacienda ha estimado en 2.000 millones de euros para 2022.
No tendría que haber sido así. De haberse cumplido las expectativas de recaudación para sus nuevas medidas que el Ministerio de Hacienda volcó en el proyecto de Presupuestos para 2021, los nuevos ingresos generados no solo habrían alcanzado para sufragar el coste de las rebajas del IVA del recibo de la luz y del impuesto especial sobre la electricidad, y la suspensión temporal del Impuesto del 7% sobre el valor de producción de la energía eléctrica, sino que habrían dejado cerca de 2.000 millones extra de margen a las arcas públicas.
Una previsión de ingresos demasiado optimista
La realidad como suele ser habitual ha sido menos generosa que las expectativas gubernamentales. Éstas apenas sí se han cumplido en los casos de la elevación del tipo del IRPF a las rentas más altas, la subida del impuesto sobre las primas del seguro y el impuesto a las bebidas azucaradas, pero han patinado de forma estrepitosa en la recaudación esperada de los nuevos impuestos.
La tasa Tobin había generado al cierre de noviembre 288 millones de euros, menos de una tercera parte de los 850 millones que se esperaban ; y la tasa Google se ha quedado en 160 millones, frente a los 968 millones que Hacienda aspiraba a sacar en forma de rendimiento fiscal de las cuentas de los grandes gigantes digitales.
En conjunto, las novedades fiscales introducidas por Hacienda han aportado hasta noviembre 1.332 millones a las arcas públicas, sobre los 3.230 millones que el Gobierno dijo que generarían. La aportación de estas medidas ha sorprendido para mal incluso a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, que en su día ya advirtió que el cálculo presupuestario pecaba de optimista y estimó su impacto real en 2.387 millones.