Quattroporte: Mezcla perfecta de elegancia, lujo y deportividad

El primer Quattroporte, nacido en 1963, ya marcaba lo que es el ADN de este modelo cuando montó un motor V8 de competición en una berlina. La versión actual mantiene la esencia, pero ahora con un motor de gasolina V6 de Ferrari . Mientras que la mecánica es propia de un vehículo de más de carreras que de carretera, a bordo y gracias a su gran distancia entre ejes, permite disfrutar de un interior amplio, con cinco plazas holgadas.

El Quattroporte GrandSport , acabado que hemos probado, tiene un acabado deportivo más acentuado, pero manteniendo las características de un gran turismo de lujo que está más acentuado en el GranLusso. En su diseño exterior, el frontal reafirma su carácter deportivo gracias a la gran toma central de aire y las tomas laterales muestran unos ángulos más marcados, mientras que la sección inferior se une a la rejilla por medio de divisores aerodinámicos. El spoiler central y las inserciones laterales, por su parte, están acabados en Black Piano.

El GranSport ofrece el estilo, la alta tecnología y la seguridad de los faros full-LED adaptativos, más la comodidad práctica del sistema de cierre amortiguado en las puertas (Soft Close). El prolongado y dinámico perfil lateral, con su sutil pero contundente emblema GranSport, es llama la atención gracias a los faldones laterales y a las nuevas llantas de aleación Atlante de 21" con pinzas de freno de color rojo.

En la parte trasera, el extractor inferior inspirado en la competición cuenta también con acabado Black Piano. Este queda enmarcado por unos potentes escapes dobles situados a ambos lados. El acabado GranSport se ofrece con el pack exterior de carbono opcional. Está compuesto por acabados de carbono para los retrovisores exteriores, los tiradores de las puertas, la cubierta del pilar B y el perfil del paragolpes delantero.

Los asientos deportivos delanteros y traseros de cuero son envolventes y proporcionan una buena sujeción para los ocupantes, incluso en la conducción más deportiva. El volante deportivo de piel está diseñado para facilitar el acceso a los botones de control del vehículo. Lleva levas de cambio , realizadas en aluminio ligero de tacto frío, crean el mismo efecto. El acabado en madera Black Piano de alto brillo del salpicadero, junto con los pedales deportivos de acero inoxidable, completan una imagen acogedora y deportiva.

En el Quattroporte, la potencia proviene de los motores que Ferrari ensambla a mano en Maranello. Sus prestaciones son las de un superdeportivo preparado para el circuito y su eficiencia es extraordinaria en lo relativo a consumo de combustible y emisiones de CO2. Para lograr este equilibrio, el equipo de desarrollo de conjuntos propulsores de Maserati adoptó un diseño con doble turbocompresor, uno para cada bancada. El doble turbocompresor no es una novedad, por supuesto.

La función Start/Stop también viene de serie. En cuanto al inconfundible tono del motor Maserati, las válvulas de derivación del sistema de escape ligero garantizan que se emite con todo su vigor. Con el modo Sport activo, que también perfila los parámetros de conducción del vehículo, las válvulas se abren para canalizar los gases de escape por la ruta más corta y de mayor energía. El resultado es un rendimiento optimizado del motor y ese inconfundible sonido de la marca, resonante y estremecedor.

El Quattroporte que hemos probado está equipado con la versión más potente del V6, con una potencia es de 430 CV, acelera de cero a 100 km/h en 4,8 segundos , con una velocidad máxima de 288 km/h. El consumo de combustible son de entre 11,9 y 12,0 litros/100 km, como pudimos comprobar en el recorrido de cerca de 800 kilómetros que realizamos a su volante.

El maletero del Maserati Quattroporte ofrece un generoso volumen de 530 litros junto con multitud de características prácticas.

La caja de cambios automática ZF de ocho velocidades mantiene una progresión en la marcha de forma natural sin tirones. Gracias a su software autoadaptativo, la transmisión modifica sus patrones de cambio según el estilo de conducción. Las dos últimas velocidades, séptima y octava, están calibradas para reducir el consumo de. La transmisión envía la potencia a las ruedas traseras de todas las versiones del Quattroporte a través de un diferencial autoblocante (LSD) equipado de serie. Con él, se garantiza la máxima tracción incluso en situaciones complicadas. El vehículo dispone de cinco modos de conducción: Auto Normal, Auto Sport, Manual Normal, Manual Sport y modo ICE (Increased Control & Efficiency).

El sistema de tracción integral inteligente Q4 analiza constantemente seis parámetros : estilo de conducción, ángulo de dirección, ángulo de giro, velocidad, deslizamiento de las ruedas y potencia, para aplicar más potencia en cada uno de los ejes de forma independiente.

El par de propulsión del motor V6 de gasolina con 430 CV se distribuye para adaptarse a la situación. En caso de que se pierda la tracción como consecuencia de una aceleración repentina o baja adherencia en el eje trasero, el sistema Q4 puede alterar la distribución del par desde el 100 % en el eje trasero al 50-50 entre las ruedas delanteras y traseras.

El interior del Quattroporte está creado alrededor de una interfaz para el conductor que es intuitiva, limpia y fácil de utilizar . El panel de instrumentos dispone de esferas analógicas de gran tamaño para el tacómetro y el velocímetro junto con una pantalla TFT de 7". Las principales funciones dinámicas están incorporadas en los botones situados junto a la palanca de cambio, mientras que otros ajustes interiores pueden regularse utilizando el sistema de infoentretenimiento Maserati Touch Control Plus (MTC+) instalado en el centro del salpicadero o los controles del volante para la pantalla TFT de 7". La unidad Maserati Touch Control Plus (MTC+) de 8,4" ocupa un lugar de privilegio en el centro del salpicadero.

El Quattroporte dispone de un completísimo de sistemas de asistencia a la conducción , como el control de crucero, la alerta de colisión frontal, control de alerta de cambio de carril, el sistema de control de crucero adaptativo y del control activo de cambio de carril para hacer la vida más fácil cuando se circula en autovías, al tiempo que proporciona una conducción semi-autónoma de nivel 2. También dispone de la alerta de ángulo muerto y el sistema que alerta cuando se aproxima un coche, por la derecha o por la izquierda, mientras se realiza la salida, marcha atrás, de una plaza de aparcamiento (solo disponible en combinación con la alerta de ángulo muerto). En el equipamiento viene también el reconocimiento de señales de tráfico y los sensores de aparcamiento, además de la cámara de marcha atrás, que se complementa con la cámara de visión de 360º.

El Quattroporte está equipado con faros full-LED adaptativos que mejoran la visibilidad y amplían la iluminación de la carretera 55 metros. Su tecnología antideslumbramiento permite a los conductores disfrutar de todas las ventajas de las luces de carretera sin afectar a los vehículos que circulan en sentido contrario.