La división de la izquierda desangra a los socialistas en la Comunidad de Madrid

Los votos que recibió la candidatura de su formación –413.751– son prácticamente la mitad de los de hace cinco años, y bastantes menos de los sumados en las elecciones autonómicas de 2011. La clave fue la división de la izquierda: mientras el PSOE se precipitaba, Podemos se convertía en la tercera fuerza política en la región, con el 11,27 por ciento de los votos, mientras UPyD e IU alcanzaban el 10,55 por ciento.

Pero si grande fue la caída del PSOE , disueltos los votos de la izquierda entre nuevas formaciones y la espectacular subida de Izquierda Unida –que multiplicó por dos sus votos–, tampoco fue pequeño el descalabro del PP en la región: aunque fue el más votado, comparando con las elecciones europeas de 2009, ha pasado de 1,1 millones de votos, un 48,5 por ciento de los electores, a apenas 652.000, el 29,8 por ciento del total, 19 puntos menos.

La participación en la Comunidad de Madrid fue la peor en unas europeas: 48,6 por ciento. Algo superior fue la de la capital, con un 50,1% de votos emitidos y mejores resultados para el PP, que alcanzó el 32,4 por ciento de los apoyos.