Todo lo que debes saber si ganas la Lotería de Navidad 2023: guía fiscal y de impuestos

Sí, la hay y es el día 22 de marzo. Desde Loterías y Apuestas del Estado se está haciendo especial hincapié en recordar que los premios tienen un plazo de caducidad de tres meses y que por tanto se tienen que reclamar antes del 22 de marzo de 2023. Según la sociedad estatal encargada de gestionar el Sorteo de Navidad, cada año se quedan sin cobrar alrededor de 30 millones en premios y reintegros.

Los premios de la Lotería de Navidad se pueden cobrar desde la misma tarde del sorteo. Si el premio es inferior a 2.000 euros se deben cobrar en alguna de las 10.600 administraciones de la red comercial de Loterías y se pueden materializar o bien en metálico o incluso por vía Bizum. Si el premio excede esa cuantía, la vía para cobrarlo es acudir a alguna de las entidades financieras autorizadas cuyo listado se puede consultar en la página web de Loterías y Apuestas del Estado.

Si usted no es cliente de la entidad no tiene por qué abrir una cuenta en esa entidad bancaria y puede cobrar el premio mediante un cheque al portador o mediante una transferencia a la entidad de la que es cliente.

Para ingresar el premio es absolutamente necesario presentar el décimo o el resguardo de compra que acredita su titularidad. Si el décimo hubiera sufrido algún tipo de accidente y estuviera deteriorado, lo que debe hacer es personarse en alguno de los puntos de venta de Loterías y Apuestas del Estado, cumplimentar el formulario de 'Solicitud de Pago de Premios', firmarlo y aportar el décimo deteriorado, que será remitido a Loterías para su autenticación.

Los décimos son documentos al portador y solo el que tiene el billete en su poder tiene derecho a recibir el premio. ¿Cómo acreditar entonces que tengo participación en un décimo premiado? Para evitar problemas, Loterías y Apuestas del Estado recomienda acreditar el reparto de participaciones por escrito y con la firma del que lo conserve para evitar la posibilidad de que el tenedor del premio intente quedarse con el premio completo. Compartir el premio con la pareja también puede resultar problemático. En ese caso, es conveniente saber que si el matrimonio es en gananciales, se reparte el 50% para cada uno. En caso de que el régimen económico sea de separación de bienes, el premio es de quien lo ha comprado, a no ser que esté acreditado que ambos compraron el número a medias.

Los premios por debajo de 40.000 euros están exentos. Si su décimo corresponde a uno de los tres premios mayores del Sorteo de Navidad, tendrá que hacer cuentas con Hacienda. El Gravamen sobre Premios de Lotería le obliga a pagar un 20% de la cuantía que exceda de esos 40.000 euros.

Si tiene un tercer premio, y percibe 50.000 euros por su décimo, tendrá que pagar un 20% de los 10.000 euros que exceden de ese umbral; si tiene un décimo del segundo premio, recompensado con 250.000 euros, tributará por 210.000 euros; y si la fortuna le sonríe con un décimo del Gordo de Navidad, pagado con 400.000 euros, su factura fiscal será el 20% de 360.000 euros.

Hay estrategias que permiten reducir esa factura fiscal. El 'broker' Laguinda ofrece la opción de formalizar un contrato de seguro que cubre esa contingencia fiscal por una cantidad de tres euros. La aseguradora asume esa factura fiscal y se la reintegra al premiado, que al año siguiente, eso sí, tendrá que declarar esa cuantía en el IRPF. La maniobra permite ahorrarse como mínimo la mitad de esa factura fiscal.

Las opciones son múltiples: apuntalar los ahorros, liquidar la hipoteca, pagar deudas, invertir... Si opta por ahorrar, abrir un depósito a plazo fijo con 100.000 euros le puede reportar 30.000 euros de rendimiento en un plazo de diez años; también puede optar por la renta variable, de más riesgo pero que promete mayores rendimientos. Otra opción, muy clásica, es la inversión inmobiliaria. Los algo más de 300.000 euros netos que puede obtener de un décimo premiado con el Gordo hace difícil maniobrar en Madrid o Barcelona, los mercados más rentables, pero le pueden dar acceso a algún activo en otros territorios.