La victoria de Fico en Eslovaquia incomoda al socialismo europeo
el socialista recibe el encargo de formar gobierno
Afrontan la posibilidad de tener que expulsar del grupo al eslovaco
Fico gana en Eslovaquia tras prometer realinear el país con Rusia
Robert Fico rodeado de prensa tras ganar las elecciones en Eslovaquia
Apenas estaban tratando de que cayera en el olvido el escándalo del 'Qatargate' que afectaba a importantes miembros de su grupo, los socialistas europeos tienen que lidiar ahora con el comportamiento de uno de sus miembros, el eslovaco Robert Fico y su partido Smer ... , que ha ganado las elecciones generales del domingo pasado, con un discurso prorruso y en contra de las sanciones europeas al régimen de Vladímir Putin.
Fico ya había sido obligado a dimitir en 2018 en medio de una ola de indignación contra la corrupción y su probable vuelta al poder deja a sus socios en el grupo socialdemócrata del Parlamento Europeo en una situación de gran incomodidad.
Hasta ahora, el grupo de Socialistas y Demócratas (S&D) había aprovechado cualquier escándalo que pudiera distorsionar el discurso del grupo mayoritario, el Partido Popular Europeo (PPE), a través de los gestos disonantes de alguno de sus miembros o aliados. Fueron los principales promotores de las campañas para hacer expulsar del PPE al partido del húngaro Viktor Orbán o poner en marcha sanciones contra la propia Hungría. También se habían mostrado implacables con la trayectoria populista del partido polaco PiS, que milita en la alianza de conservadores (ECR), en respuesta a sus comportamientos .
Comparaciones con Orbán
Ayer mismo, coincidiendo con el anuncio de que Fico ha recibido el encargo de formar Gobierno, el líder del PPE, Manfred Weber, comparó directamente al político eslovaco con el húngaro Orbán. «Siempre que escuchamos a Fico suena como Orbán», dijo el jefe de los populares, refiriéndose a la postura del eslovaco sobre Rusia y «hacia las minorías» de su país, precisamente húngaras. Weber recuerda las enormes presiones políticas que él recibió en 2021 para que expulsase al partido de Orbán del PPE. «Lo que pido es un proceso de clarificación por parte de los socialistas, ¿qué están haciendo ahora con su propia familia?».
En efecto, los socialistas europeos han vivido tradicionalmente como si fuesen inmunes a cualquier reproche, mientras que todos los aspectos escabrosos dentro del PPE o en la derecha de la cámara eran utilizados profusamente como munición en la eurocámara. Es verdad que ahora, el presidente de los socialistas europeos, el sueco Stefan Lövfen, había dicho antes de las elecciones del domingo que si lleva a cabo su programa electoral podría ser expulsado de la familia. Ayer, uno de los vicepresidentes del grupo socialista, el portugués Pedro Marques, tuvo que aguantar una ofensiva de preguntas en la rueda de prensa del inicio de la sesión parlamentaria a propósito de la situación que ha creado la victoria de Fico y la posibilidad de que desembocase en abrir un expediente sancionador como ya ha hecho el Parlamento en los casos de Polonia y Hungría.
Posibles sanciones
Para Marques sería necesario separar lo que se ha dicho en la campaña, que además de proponer el apoyo a las tesis de Rusia y no a las de la UE, también incluía una retórica homofóbica y antiinmigrantes, lo que van a juzgar serán las acciones concretas que lleve a cabo si consigue formar gobierno. «Si esto continúa, si pasa de la retórica a la acción en un nuevo gobierno eslovaco, podría iniciarse un proceso de sanciones, y el proceso de expulsión podría ser una de estas acciones». Según Marques, «antes de la campaña este tema ya lo abordamos en el PSE y hubo una discusión adecuada con Smer», aunque por lo que se ha visto en la campaña, no ha tenido mucho efecto.
En el Parlamento Europeo. los socialistas han estado siempre en primera línea a la hora de señalar políticas que chocan con los valores europeos cuando se trataba de poner en evidencia a partidos de centroderecha o conservadores. En esta ocasión, cuando se trata de un miembro de su familia, no van a poder resistir mucho tiempo sin tomar medidas claras contra uno de los suyos. Fico, de hecho, también ha empezado a separarse. En redes sociales se ha quejado de que no le han felicitado desde el PSE y califica la situación de «chantaje a un político soberano».