Por qué Trump no podría autoindultarse por el caso de Georgia si llega a presidente

Es la cuarta inculpación contra el exmandatario, actualmente favorito para la nominación republicana de cara a las presidenciales de 2024, pero, a diferencia de las anteriores, esta sería la única con la que Trump, en caso de ser condenado, no podría aplicarse el perdón presidencial ni hacer que la fiscalía retirara los cargos, porque se trata de una sentencia del estado de Georgia, sobre el cual el estado federal carece de autoridad.

La acusación contiene un total de 41 cargos, que incluyen declaraciones falsas, usurpación de cargo público, falsificación de documentos y uso de documentos falsos, presión a testigos, una serie de delitos informáticos o incluso perjurio.

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Los otros casos por los que ha sido inculpado son: el presunto intento de conspiración para alterar el resultado de las elecciones de 2020 (en un caso en Washington), por negligencia en la gestión de documentos confidenciales (en un tribunal de Florida) y por supuestos pagos ocultos a una antigua actriz porno para comprar su silencio (en una corte de Nueva York).

Si Trump resultara electo desde prisión, sería complicado vislumbrar lo que podría ocurrir. En un escenario como ese, es posible que los miembros de su gabinete invoquen la 25ª Enmienda y le declararan incapaz para el cargo, pero él ya se cuidaría de nombrar en su equipo de gobierno a personas dispuestas a arriesgarse.