Stoltenberg urge a Alemania a enviar más munición a Ucrania

«No subestimemos al ejército ruso», ha dicho, a medida que se acerca el invierno, los misiles continúan «lloviendo» sobre las ciudades e infraestructuras ucranianas. «Nosotros en Europa estamos pagando la guerra con altos costes de energía e inflación, pero Ucrania está pagando con sangre», ha arengado a los ministros de Defensa asistentes, entre los que se encuentran los de Finlandia y Suecia, «y si los sistemas totalitarios ven ahora que pueden tener éxito, todos pagaremos un precio mucho más alto«.

Stoltenberg ha subrayado que «la mejor manera de proteger la paz es ayudar a Ucrania« y ha señalado que ahora es extremadamente importante reparar y mantener los sistemas suministrados (artillería, lanzacohetes y vehículos) después de las intensas batallas. También ha sido muy claro respecto a la necesidad de proporcionar más municiones. Stoltenberg ha elogiado una vez más las contribuciones alemanas, tanto militares y financieras como humanitarias, pero ha pedido que esta ayuda no se dé por terminada.

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Ha recordado la reacción de Alemania a la invasión rusa de Ucrania como un «punto de inflexión histórico» que requiere continuidad. «Necesitamos una Bundeswehr fuerte y operativo y una industria armamentista fuerte», y ha hecho un llamamiento a Alemania a seguir ampliando sus capacidades militares. «La OTAN confía en Alemania y cuenta con la Bundeswehr», ha terminado su intervención.

Anoche, en la cena que Stoltenberg y el canciller Scholz compartieron en la Cancillería de Berlín con el primer ministro noruego y sueco, el canciller alemán se mostró a favor de una cooperación armamentista más intensa a nivel europeo y dijo que se había logrado un «avance» en el sistema europeo conjunto de aviones de combate con Francia y España. «El principio rector es la seguridad integrada», defendió Scholz, mientras sus invitados celebraron que Alemania pueda pasar el invierno con calefacción gracias a los suministros extraordinarios proporcionados por países como Estados Unidos y Noruega.

Stoltenberg, por su parte, prometió apoyo de la OTAN y el establecimiento de un puesto de control específico para monitorear la infraestructura gasística costera y mar a dentro, como las plataformas de producción, tuberías y cables. «Es de nuestro interés vital hacer más para asegurar esta infraestructura y protegerla de actos de sabotaje en el futuro», afirmó el Secretario General de la OTAN, que a cambio exigía la participación de Alemania en el urgente suministro de municiones a Ucrania.

El caso es que Alemania tiene sus propios problemas de equipamiento. Hay informes que sugieren que, si Alemania entrase hoy en guerra, su ejército tendría municiones suficientes para dos días de contienda. Después el alto el fuego sería forzoso. El Gobierno ha implementado una partida presupuestaria extraordinaria en 2023 de 100.000 millones de euros para cubrir esa carencia, pero la cantidad ha quedado en pocas semanas reducida a 85.000 millones por efecto de la inflación, por lo que la lista de compras y prioridades ha debido ser rectificada y el parlamento ha retrasado el visto bueno a determinadas compras, como helicópteros, aviones de combate y corbetas.

Esta situación no justifica para Stoltenberg que disminuya el apoyo alemán a Ucrania, que reporta falta de municiones y fallas en los sistemas de artillería Panzerhaubitzen 2000 suministrados por Alemania y los Países Bajos.

Stoltenberg ha advertido, además, sobre la independencia europea de política de Defensa. «No creo en 'Europa sola', ni en 'Estados Unidos solo'», ha dicho, y ha reiterado que sólo la OTAN puede garantizar la seguridad de forma efectiva. Sin embargo ha recordado que el 80% del gasto militar en la alianza transatlántica procede de países como EE.UU., Gran Bretaña, Canadá o Turquía. En el debate sobre propias tropas de intervención de la UE, ha señalado que la OTAN ya tiene tales unidades, sugiriendo que son superfluas. Stoltenberg, por lo demás, ha criticado de nuevo la «peligrosa dependencia» del gas ruso. «Esto debe llevarnos a conclusiones sobre las dependencias de otras potencias autoritarias, entre las cuales China es una muy destacada», ha prevenido.