Pequeños delitos, rugby, repartidor de comida y chico «ejemplar»: la compleja vida de Nahel, el origen de los disturbios en Francia

El adolescente formaba parte de un programa de integración y estaba estudiando para ser electricista

Nueva noche de protestas violentas en Francia pese al despliegue de 40.000 policías: hay 667 detenidos

Disturbios en Francia, en directo

Marcha en Nanterre en homenaje a Nahel, asesinado a tiros en París por un policía Reuters

La muerte de Nahel M, de 17 años, en el suburbio parisino de Nanterre el martes 27 de junio ha desencadenado disturbios en varias ciudades de Francia y ha reabierto el debate sobre la violencia policial después de que le dispararan por negarse ... a pararse en un control de tráfico.

No era la primera vez que hacía caso omiso de la Policía. Según distintos medios franceses, el fin de semana pasado fue remitido a la Fiscalía de Nanterre y en 2022 estuvo implicado también en otra negativa a cumplir con las autoridades. No obstante, aunque «ya era conocido por la Policía por negarse a cumplir y conducir sin licencia, sus antecedentes penales estaban limpios», ha indicado uno de los abogados de la familia en el programa de televisión 'C à vous'.

Pero tal y como han señalado políticos franceses: «La negativa a cumplir no da licencia para matar». Esto lo escribió Olivier Faure, el primer secretario del Partido Socialista, en Twitter.

Según el diario francés 'Ouest-France', también era conocido por la Policía por actos como: encubrimiento y rebelión contra policías en 2020; uso de matrículas falsas, ocultación y circulación sin seguro en febrero de 2022; y consumo y venta de estupefacientes en enero y marzo de 2023.

Programa de integración y actitud «ejemplar»

Nahel, de ascendencia argelina y marroquí, era hijo único y trabajaba como repartidor de comida, según ha informado la 'BBC'.

Desde hace tres años estuvo jugando en el club de rugby 'Piratas de Nanterre' y había formado parte de un programa de integración para adolescentes con dificultades en la escuela, dirigido por la asociación 'Ovale Citoyen'.

El objetivo de este programa es conseguir que personas de áreas desfavorecidas aprendan un oficio y Nahel se estaba formando como electricista.

El presidente del Ovale Citoyen, Jeff Puech, ha señalado que tenía la voluntad de encajar social y profesionalmente, «no era un chico que traficaba con drogas o que se divertía con la delincuencia juvenil». Y también ha subrayado que su actitud era «ejemplar, lejos de los comentarios vomitivos que se ven en las redes sociales».

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