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Palestinos desplazados huyen de la zona norte de Gaza Reuters
Pedro Pitarch

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Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) prosiguen bombardeando objetivos en la franja de Gaza, Líbano y Siria. En la Franja, la lista de objetivos está encabezada por grupos residuales de Hamás, camuflados en los campos de refugiados de Jabalia, en el norte, ... y de Maghazi y Deir el-Balah (zona de Az Zawayda) en el centro, campos monitorizados por la Oficina de la Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios. Compleja situación que estaría en el origen del reciente veto del parlamento israelí a la Unrwa, agencia de la ONU para los refugiados palestinos. En el Líbano, los objetivos preferentes de la aviación israelí son las instalaciones logísticas de Hizbolá en la periferia sur de Beirut. Y, en Siria, los polvorines e instalaciones logísticas de Hizbolá en la zona de Al-Quseyr, a solo 10 km de la frontera libanesa. Asimismo, se está incrementando la tensión en Cisjordania con frecuentes incursiones de las FDI. En tal atmósfera bélica, Netanyahu refrendó, el pasado jueves, la actitud ofensiva de aquéllas con una finalidad inequívoca: «impedir que Irán obtenga armas nucleares», que calificó como objetivo supremo. Eso advierte no solo de su intención de mantener el actual nivel de hostilidades, sino también de su vocación de escalar hasta llegar, en caso necesario, a una guerra abierta con Irán.

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