Los altos cargos militares rusos purgados por el Kremlin o muertos en el frente
Desde que comenzó la invasión en Ucrania, varios generales han perdido la vida y otros tantos han sido depuestos por su mal desempeño en el campo de batalla, sus quejas o por traición
Las incógnitas que Zelenski intenta despejar
Generales rusos asesinados durante la invasión en Ucrania
Es un secreto de Estado el número de generales rusos que han perdido la vida en Ucrania. El Kremlin no suele reconocer el número de bajas en combate de altos cargos militares, y aquellas cifras relacionadas con el conflicto ucraniano aún no son actualizadas. La ... última vez que se hizo fue el 21 de septiembre de 2022 cuando el Vladimir Putin decretó una movilización de la población masiva para unirse a las tropas. Hasta entonces, las fuerzas armadas habían sufrido 5.937 muertes, según había indicado el Ministerio de Defensa Ruso.
Son varios los militares de alto rango que han muerto durante la invasión en Ucrania, aunque no se sabe la cifra real con certeza. Kiev ha afirmado que son quince, pero al menos cuatro de esas muertes señaladas han sido refutadas posteriormente. Sin embargo, Moscú ha confirmado la muerte de seis de ellos. El resto aún no se ha verificado o desmentido.
Estos son los generales rusos cuyas muertes han sido confirmadas por el Kremlin.
Los generales rusos cuyas muertes han sido confirmadas por el Kremlin
Andréi Sujovetski
Llegó a ser subcomandante del 41º Ejército de Armas Combinadas. Murió en 2022, durante la invasión, por el disparo de un francotirador ucraniano. También participó en la intervención militar en la guerra civil siria y fue condecorado por Rusia por su papel en la anexión de Crimea en 2014.
Oleg Mityaev
Mityaev, de 46 años, estaba al mando de la 150ª división de fusileros motorizados, que dirigía desde 2020. Había combatido previamente en Siria y en 2016 había sido designado comandante de una base militar rusa en Tayikistán. El regimiento Azov de Ucrania afirmó ser el responsable de la muerte de Mityaev.
Kanamat Botashev
Botashev, nacido en 1959, se graduó como piloto de cazabombarderos y llegó a convertirse en general, pero fue dado de baja en 2013 cuando fue acusado de estrellar un caza Su-27 sin permiso para volar. Más tarde fungió como vicepresidente de aviación de la Sociedad de Voluntarios para la Cooperación con el Ejército, la Aviación y la Marina en la región de Leningrado. En mayo de 2022, Ucrania derribó el avión de ataque ruso Sukhoi (SU-25) que pilotaba; no tuvo tiempo de eyectarse.
Vladímir Frolov
Fue subcomandante del 8º Ejército Ruso y murió en abril de 2022 en combate en el puerto ucraniano de Mariúpol. Los medios de comunicación rusos lo identificaron como uno de los hombres importantes en las tropas rusas que mantuvieron durante semanas una ofensiva sobre la devastada ciudad de Mariúpol.
Artem Nasbulin
El general de división Artem Nasbulin, jefe del Estado Mayor del 22º Cuerpo del Ejército, murió en el ataque ucraniano, realizado con misiles HIMARS, según detalló Serhiy Bratchuk, portavoz de los militares de la región de Odesa.
Roman Kutuzov
Kutuzov fue comandante del 29º Ejército de la Federación Rusa y murió en combate en junio de 2022 cuando dirigía la ofensiva en el Donbás. Los informes de su muerte comenzaron a aparecer en los canales rusos de Telegram para luego ser confirmados por los medios estatales rusos.
Los generales depuestos
Existe otra lista de militares de gran importancia para el Ejército ruso que no perdieron la vida en Ucrania, pero sí su puesto, ya sea por su mal desempeño en la invasión, sus críticas contra la cúpula militar o por ser sospechosos de traición. Como es el caso del coronel general Gennady Zhidko, quien había sido nombrado 'Héroe de la Federación Rusa' por su papel en el alto mando de las tropas rusas en Siria en 2017 y, desde mayo a octubre de 2022, fue el comandante de las tropas rusas en Ucrania, hasta que fue sustituido por el general Sergey Surovikin, apodado 'general Armagedón', tras varios fiascos ante la resistencia ucraniana y coincidiendo con algunos éxitos de Kiev en Jersón y Jarkov. Zhidko, a sus 57 años, murió a principios de agosto tras una larga enfermedad.
Surovikin es uno de los rostros emblemáticos del asalto ruso contra Ucrania. Pero sus vínculos con el grupo paramilitar Wagner y su líder Yevgueni Prigozhin acabaron con él. Desde la rebelión abortada de Wagner, el influyente general de 56 años desapareció del espacio público, señal de su declive para los expertos. Este miércoles Rusia anunció que Surovikin fue cesado de sus funciones.
El general Serguéi Surovikin estrecha la mano del presidente Putin
En octubre, Surovikin fue puesto al mando de las operaciones militares rusas en Ucrania, pero en enero esa función pasó a manos del general Valery Gerasimov, jefe del Estado Mayor, y Surovikin fue nombrado su adjunto. Gerasimov también desapareció tras el levantamiento de los Wagner, pero un par de semanas más tarde, reapareció presidiendo una reunión con mandos militares.
El general Iván Popov, que tenía mando sobre las tropas rusas en Ucrania, es otro de los que fue destituido por hacer críticas a la cúpula militar. Según Popov, había informado a sus superiores sobre los graves problemas en el frente, «la falta de medios contra las baterías artilleras, ausencia de estaciones de rastreo del emplazamiento de la artillería del adversario y muertes y lesiones masivas de nuestros hermanos por parte de la artillería enemiga». Un comentario que no habrá gustado al Ministerio de Defensa, pues enseguida lo apartaron del mando.
Según el Ministerio de Defensa del Reino Unido, es probable que seis de los principales generales de Rusia hayan sido despedidos desde el inicio de la guerra en Ucrania, debido al pobre desempeño del ejército ruso durante la invasión.