Quedan por evacuar los últimos 800 turistas varados en Machu Picchu

Hasta el momento más de 2. 525 turistas han sido trasladados desde la región de Machu Picchu a la localidad de Ollantaytambo a través de los 11 helicópteros del Ejército peruano y varias unidades ofrecidas por empresas privadas. Algunos habitantes de los pueblos del departamento de Cuzco que resultaron afectados también han sido movilizados a otros poblados.

El ministro de Comercio Exterior y Turismo, Martín Pérez, informó de que este jueves por la tarde lograron evacuar a un total de 1.

402 personas en 93 viajes realizados en los helicópteros, y aclaró que «si el clima esta bueno» este viernes «se acabaría con el rescate de los aproximadamente 800 turistas que faltan».

Los turistas extranjeros han tenido que dormir en carpas improvisadas en las plazas de Aguas Calientes y en las estaciones de trenes, debido a que los hoteles y hostales de Machu Picchu han colapsado. La falta de agua y alimentos se ha hecho evidente ante la gran emergencia surgida en Cuzco desde el pasado fin de semana.

A este respecto, Pérez reconoció que el número de evacuados ha superado la cifra que el Gobierno había calculado cuando comenzó la emergencia en la zona, lo que ha retardado de alguna manera el proceso de rescate de las personas que permanecen varadas en Machu Picchu.

«En lo que va de la semana hemos podido evacuar 2. 545 turistas, que es una cifra superior a la que nosotros teníamos como conteo inicial que calculamos 1. 900», comentó.

No obstante, aseguró que hay un «total control» por parte de las autoridades peruanas que están suministrando «provisiones, agua, alimentos» y enviaron unos 400. 000 dólares (287. 000 euros) para reponer todos los cajeros automáticos, de modo que los turistas puedan disponer de efectivo. «Todo se ha normalizado prácticamente», indicó.

«El puente aéreo se mantendrá hasta evacuar a todos los turistas, aunque hay algunos que no tienen muchas ganas, están muy contentos, pero de forma obligatoria vamos a evacuar a todos», afirmó el ministro peruano en declaraciones a la emisora RPP.

Los torrenciales aguaceros han provocado inundaciones y deslaves que han destruido unas 16. 000 hectáreas de cultivo y más de 3. 000 viviendas, dejando damnificadas a unas 25. 000 familias, informó a RPP el presidente de la Región Cuzco, Hugo González Sayán.

Las vías de comunicación colapsaron debido a los derrumbes de algunos cerros y montañas que han afectado a unos 14 puentes que tuvieron que ser cerrados porque están a punto de colapsar.

Unas 120 toneladas de alimentos y 18. 000 litros de agua, adquiridas con los recursos públicos establecidos en el plan de emergencia, han sido repartidos en las provincias de Quispicanchis, Lucre, Limatambo, Oropesa, Calca, Pisac, Urubamba, Machu Picchu, Maras, La Convención y Santa Teresa.

González Sayán ha dicho que la magnitud de los daños por el mal tiempo ha sido «tan grande» que la feligresía de Cuzco ha decidido sacar a las calles la imagen del Señor de los Temblores para hacer rezos colectivos en los que le piden que ponga fin a este supuesto «castigo divino».