París y Berlín proponen una cumbre europea con Putin

La UE y Rusia no tienen una reunión ordinaria desde 2014, cuando las relaciones se congelaron a causa de la anexión de la península de Crimea y el inicio del conflicto armado en otras regiones del este de Ucrania. El Consejo Europeo ha intentado en anteriores reuniones adoptar una posición conjunta acerca de las relaciones con Rusia , pero las visiones divergentes de unos países y otros han venido aplazando la discusión. La iniciativa presentada por el francés Emmanuel Macron y la alemana Angela Merkel quiere seguir la estela de la reunión que han mantenido el presidente norteamericano Joe Biden con Putin en Ginebra que según fuentes francesas «ha sido posible a pesar de la gravedad de las acusaciones que se habían hecho personalmente» ambos mandatarios. Hasta ahora, la UE se ha centrado principalmente en las sanciones a Moscú, que precisamente fueron prorrogadas un año más este lunes en la reunión del Consejo de ministros de Asuntos Exteriores. La propuesta no ha definido si se trataría de una reunión conjunta de todos los miembros del Consejo Europeo con el autócrata ruso o si sería un encuentro con los presidentes de las dos instituciones comunitarias, la Comisión y el Consejo.

El Consejo Europeo ha invitado a intervenir en el comienzo de la reunión al secretario general de la ONU, Antonio Guterres .

Además de las cuestiones referidas a la inmigración , campo en el que se ha previsto también revisar las relaciones con Turquía después de un periodo de grandes tensiones, los líderes europeos tienen intención de debatir sobre la situación de la recuperación económica y la evolución de la vacunación en sus respectivos países. Sin embargo, la polémica sobre la ley húngara que limita la información o difusión sobre temas relacionados con la homosexualidad en las escuelas se ha invitado al programa y es más que probable que forme parte de las discusiones de los líderes. Catorce países han enviado un manifiesto a la Comisión pidiendo que intervenga ante las autoridades húngaras, mientras que el primer ministro de este país, Viktor Orban , sostiene que la UE debería abstenerse de intervenir en estos temas. La Comisión Europea va a enviar un apercibimiento al Gobierno húngaro. La presidenta Ursula von der Layen ha declarado que esa legislación «es vergonzosa».