Muere el último jefe del Ejército de la dictadura argentina
Cristino Nicolaides t enía 86 años y un historial con los peores crímenes: secuestrar bebés, entregarlos a otras familias y colaborar en la desaparición de miles de personas
CARMEN DE CARLOS
Tenía 86 años y un historial con los peores crímenes para la Humanidad : secuestrar bebés, entregarlos a otras familias y y colaborar en la desaparición de miles de personas. Cristino Nicolaides , el último jefe del Ejército argentino en ocupar ... ese puesto durante la dictadura (1976-83) murió en Córdoba por falta de oxígeno . Sus pulmones, como sus cenizas, se hicieron aire.
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Alejandro Zeverín, su abogado, anunció: “Tuvo una descompensación pulmonar, un servicio de emergencias trató de reanimarlo pero finalmente falleció la noche del sábado”. Su defendido cumplía prisión domiciliaria por razones de edad después de ser condenado a 25 años de cárcel por la desaparición de seis guerrilleros montoneros . Apelada la sentencia, a Nicolaides le aguardaban otras causas vinculadas al terrorismo de Estado de los años 70.
No estuvo en el juicio a las Juntas Militares
El general muerto, a diferencia de Jorge Rafael Videla , con quien compartía estos días banquillo en la causa de apropiación de menores , no fue acusado en el histórico juicio a las Juntas Militares de 1985. En aquel proceso se juzgaron las tres primeras juntas, pero no la cuarta (y último Gobierno de la dictadura), por decisión del presidente Raúl Alfonsín.
La justicia le alcanzó, de la mano del último presidente de facto, Reynaldo Bignone, el almirante Rubén Oscar Franco y el brigadier Augusto Jorge Hughes, por ser todos responsables del Documento Final Sobre la Lucha contra la Subversión y el Terrorismo que dio por terminado el régimen militar. En él confirmaron que los desaparecidos -más de 10.000 según el primer informe oficial de la Conadep- estaban muertos. Asimismo, se autoconcedieron una amnistía.
La decisión de la familia de incinerar a Nicolaides ha generado malestar y suspicacias en Argentina, donde la sociedad tiende a creer en los muertos sólo cuando los ve de cuerpo presente. En caso contrario, la leyenda suele instalarse en el imaginario colectivo. Como Nicolaides tenía pendiente procesos judiciales, también se reprocha a sus allegados la cremación porque no se ha podido “constatar fehacientemente su identidad” y, según fuentes judiciales que cita el diario Clarín , “el imputado puede evadir su responsabilidad ante los juicios”.
La funeraria informó que el velatorio se hizo en la casa de difunto, con el féretro abierto.
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