Largo camino en mitad de la noche para escapar de Ucrania. Los civiles huyen del conflicto ante el temor de que los combates vayan a más. La vecina Polonia ha abierto sus puertas y ante ellas miles de personas hacen fila para entrar. Sobre todo ... niños y ancianos, porque la juventud apoya a su presidente y se muestra dispuesta a tomar las armas para defender su país. El control en la frontera es exhaustivo y la cola crece cada vez más. Las autoridades polacas han habilitado ocho puntos de entrada, pero el colapso es evidente. Un futuro incierto para muchos de ellos que pasan a ser refugiados de una guerra que todavía no se sabe cuándo acabará.-Redacción-
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