Guillermo Fariñas: «El cambio democrático va a llegar a Cuba indefectiblemente»

El objetivo de estos sistemáticos arrestos, según Fariñas, es hostigarlo para que opte por el exilio así como por la fuerte labor de proselitismo político que desarrollan los miembros de Fantu.

-En una de esas detenciones lo trasladaron y mantuvieron en un hospital, como la acaecida pocos días antes de la convocatoria a la Marcha Cívica por el Cambio, el 15 de noviembre (15-N) pasado. ¿Cómo y por qué ha sido así?

En ese momento me encontraba convaleciente, poniéndome sueros debido a una infección renal y por eso me llevaron para una sala de transplante renal en el hospital en donde me mantuvieron aislado hasta que pasó la convocatoria del 15-N. Con eso se demostró algo que hemos denunciado, que usan los centros del Ministerio de Salúd Pública como lugares de detención ; y la respuesta cínica que han dado al respecto, a las instancias internacionales, es que ellos se están preocupando por mi salud, esto nos da la medida de que quieren lavarse la cara ante ellos.

-Usted apoyó la convocatoria del 15-N¿Qué opina de la salida del país de Yunior García Aguilera, uno de los principales promotores de esa iniciativa?

Mi opinión es que él se comportó de una manera cobarde, no hay otro adjetivo. Él desconoció la historia de Cuba de manera total, Martí no hubiese caído en combate, o Maceo o tantos y tantos padres fundadores de la patria cubana. Creo que él puso por encima del bienestar de la patria su bienestar personal. Creo que él no leyó, no se instruyó con respecto a lo que es capaz de hacer esta junta militar; si lo hubiese hecho, hubiese estado preparado para lo que le ocurrió y, realmente, la presión sobre él fue más bien sicológica no física, o sea, no hubo torturas, golpizas, violaciones a familiares cercanos, o abusos sexuales; hay compatriotas que han aguantado cosas mucho peores y han mantenido el deber con la patria por encima de todo. Él dejó embarcado a todos los que lo apoyaron y no supo estar a la altura que correspondía.

-Una de las últimas detenciones acaeció cuando pretendía asistir al Tribunal Provincial de Santa Clara en momentos en que se efectuaban juicios contra 16 manifestantes del 11 de julio (11J) de 2021 en el territorio. ¿Cuál es su posición ante los juicios que se están desarrollando a los manifestantes del 11J? ¿Cómo pudiera la oposición cubana apoyar a esos presos políticos y sus familiares?

Me detienen porque, según me dijeron, estaba haciendo labor de subversión política.

Me llama poderosamente la atención que en el caso de Villa Clara, el jefe de instrucción penal del Ministerio del Interior dijo pocos días después de los sucesos del 11-J que habían arrestados a 1.078 ciudadanos cubanos de esta provincia; de esos, no llegan a 70 los que han sido procesados, por lo tanto, nos da la medida de que ellos lo que quieren es dar un escarmiento y, a la vez, no quieren demasiados presos porque entonces, o tendrían que dedicar una cárcel para presos políticos solamente, o las cárceles se saturarían de presos políticos, convirtiéndose en algo inmanejable. Por lo tanto, a la mayoría lo que están es tratando de multarlos, torturarlos, amenazarlos, golpearlos... para que vean la impunidad y tiendan a irse del país. Esto trae como consecuencia que la ganancia sea neta para la junta militar que gobierna en Cuba porque se quitan el problema de la protesta social interna y también favorecen que, en un futuro, esas personas envíen remesas en divisas a sus familiares , que van a ser manejadas por esa misma junta militar.

La oposición debe mostrar solidaridad ante estos juicios contra personas que protestaron contra el Gobierno y pidieron cambios políticos; la solidaridad es fundamental para que el preso se sienta reconocido como un opositor político que está en prisión y que sigue haciendo su labor, la solidaridad es un estímulo, un apoyo moral y espiritual también para los familiares pues la mayoría ni siquiera tiene experiencias de este tipo, enfrentando al régimen.

-Tras el 11-J y el 15-N en el país se vive una aparente calma, por un lado se desarrollan cientos de juicios a presos ya considerados políticos, y la Seguridad del Estado reprime cualquier mínima iniciativa de protesta de la sociedad civil. El miedo impera. ¿La oposición cubana y la sociedad civil cómo podrían revertir esta situación?

Yo creo que el estallido social anticomunista, popular y masivo que ocurrió el 11-J era algo que estaba esperando la junta militar en el poder y el hecho de la compra de los equipamientos antimotines nos da la medida de ello. Que hubiera protestas en 72 municipios , de todas las provincias de Cuba, nos indica que fue algo masivo, en comparación con el llamado 'maleconazo', ocurrido en 1994, cuando se lanzaron a las calles solo tres municipios de La Habana. Creo que este fue más masivo debido fundamentalmente a que la convocatoria se hizo a través de las redes sociales, internet que fue cortado ese mismo día para evitar más alzamientos. Por eso yo creo que un acceso a internet independiente en Cuba es lo que nos llevaría a lograr que el alzamiento cívico sea mucho mayor en próximas ocasiones.

Es fundamental que hagamos uso de todos los métodos reconocidos por Gene Sharp en su libro 'De la dictadura a la democracia'; en el caso de Fantu, hemos acordado, ante la situación represiva, que el mayor por ciento de militantes no sean públicos, o sea, clandestinos, esto con el objetivo de que la represión sea menor. Y así, cada grupo u organización debe crear sus estrategias. También es fundamental el apoyo internacional.

-¿Cómo valora el contexto cubano actual y el futuro inmediato? ¿Prevé un cambio democrático, movida de fichas por parte del régimen o una nueva protesta en Cuba?

Primero debemos valorar quiénes están en el poder en Cuba y, lo más importante, a qué aspiran. En el poder actualmente están los descencientes sanguíneos, ideológicos o personales de los componentes fundamentales del S egundo Frente Oriental Frank País , encabezado por Raúl Castro, y elementos que desde 1959 se unieron a Raúl Castro. En esto hay dos corrientes fundamentales, la familiar, encabezada, desde el punto de vista financiero, por Luis Alberto Rodríguez López-Callejas (exyerno de Raúl Castro), al frente de Gaesa; y, por otro lado, el grupo de control y represión de la sociedad cubana, encabezado por Alejandro Castro Espín , a quien ya ascendieron a general de brigada, a través del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional, organismo que es un derivado de la Dirección Superior del Minfar, y al que se subordinan todas las inteligencias y contrainteligencias con que cuenta el castrismo.

Un tercer elemento es la llamada junta de generales , los más poderosos, incluyendo a Álvaro López Miera (Ministro de las FAR ), Leopoldo Cintra Frías, Ramón Espinosa Martín y Joaquín Quinta Solá (Viceministro de las FAR). Está la duda de cómo va a actuar ese estamento militar el día que Raúl Castro deje de existir porque ellos son incodicionales a este pero no se sabe si lo serán a sus hijos, a sus nietos, o a sus yernos.

La otra situación que debemos ver es que, indiscutiblemente, la sociedad cubana y los que la gobiernan se han despolitizado, desideologizado y mercantilizado, o sea, aquí todo está en función de qué prevendas obtienes, qué acceso a divisas tienes y eso es lo que realmente te da poder; y esto sucede aunque ellos no lo quieran reconocer, aunque sigan con un discurso de consignas políticas e ideológicas.

Yo creo que un cambio democrático va a venir, indefectiblemente, lo que los miembros del neo-raulismo (los nuevos) están tratando de demorar, están tratando de llevarlo a una posición como la rusa o la egipcia, donde los militares sean un estamento intocable y se pueden hacer elecciones pero lo que digan los militares es intocable, con algo de apertura. Para esto, ellos van a crear, o puede ser que ya tengan creado, líderes opositores que en algún momento entren en componenda con la junta militar para hacer una transición democrática espuria. Creo que hacia ahí va la situación de la apertura democrática en Cuba, pero hay un impedimento y es la dependencia económica a las remesas, fundamentalmente de los Estados Unidos; ante esto, ellos tienen que tratar de que, a la vez que convencen a los cubanos de aquí dentro, tratar de convencer a los cubanos del exilio por que sino se cortan las remesas y puede crearse el caos. Esos empujes a que la mayoría de los opositores se vayan del país va en base a lo que te estoy planteando.

O sea, debemos ver todo esto como una cuestión estratégica, yo ahora no puedo decir cómo va a terminar esto ni darle un plazo porque la junta militar en el poder está bien clara de que tiene que tratar de que la generación más radical del exilio, los más viejos, desaparezcan físicamente, y a la vez, hacer componendas con generaciones más jóvenes del exilio para que sean mucho menos radicales. Esa es mi visión.

Trataré de mantenerme dentro de Cuba aunque sea altamente peligroso. Soy de las personas con un pensamiento conservador, de no hacer ningún tipo de pacto que vaya contra los principios de la democracia representativa, y así pensamos como organización. Nosotros estamos exigiendo la abolición inmediata de la Constitución de la República de 2019 y la implantación provisional de la Constitución de 1940 como garantía de que no haya ningún tipo de componenda con la junta militar en el poder.

El hecho de que la situación económica no se resuelva y que cada día se esté agudizando más la crisis, por supuesto que puede traer otro estallido social, que va a ser con otras características porque la intolerancia de la junta militar está trayendo como consecuencia que esa juventud, que ya está cansada y que no tiene recursos para irse del país, simplemente está en función de comenzar a hacer acciones que, desde el punto de vista de una academia militar, se consideran de guerrilla urbana, o sea, hacer sabotajes, ocasionar daños materiales, atacar físicamente a connotados delatores o represores, porque no ven otra salida, porque ya se dieron cuenta de que protestando de manera no violenta son condenados a altas penas de privación de libertad, por lo que están empujados a hacer la guerrilla urbana y lo cual puede derivar en una guerra civil porque el estamento militar en cualquier momento puede dividirse y ahí sí habría un derramamiento de sangre por la tozudez de los que están disfrutando del poder total.