El periodista marroquí detenido hace un mes comparece ante los tribunales

El juez de instrucción del Tribunal de Primera Instancia de Salé (ciudad vecina de Rabat), que interrogó a Anuzla en una audiencia preliminar a puerta cerrada de más de tres horas, anunció que pospone el caso al 30 de octubre para continuar la investigación.

De momento, el periodista -encarcelado por haber informado en su página web Lakome sobre un vídeo de Al Qaida en el Magreb Islámico dedicado a Marruecos y por facilitar un vínculo hacia esa grabación- continuará en prisión a la espera de que se decida sobre la solicitud de libertad provisional planteada por la defensa.

El periodista estuvo acompañado de un solo abogado defensor, Hassan Semlali, que se incorporó recientemente al caso al parecer por voluntad del propio Anuzla y de su familia, en lo que parece un intento de «despolitizar» este tema .

Según Semlali, Anuzla, uno de los periodistas marroquíes más críticos con la monarquía y el funcionamiento de las instituciones en general, expresó durante la audiencia sus ideas con «fuerza», a pesar de que durante estos días algunos medios han especulado con el bajo estado de ánimo del informador.

Ante la repentina e inesperada incorporación de Semlali , los cuatro abogados que le defendían hasta ahora -todos ellos destacados por su participación en notorios casos de protección de los derechos humanos- decidieron retirarse para «mantener la coherencia de la defensa», según hicieron saber en un comunicado publicado anoche después de visitar a Anuzla en la prisión de Salé.

Polémica en la defensa

Los cuatro letrados aseguraron en la nota que su decisión también fue tomada después de que «un abogado se haya incorporado al caso fuera de las reglas y usos de la profesión», en alusión a Semlali.

La llegada de un nuevo abogado es otro de los inesperados acontecimientos del caso de Anuzla, junto al polémico cierre de su portal , inaccesible desde el pasado jueves en sus dos versiones árabe y francés, una clausura que ha dejado entrever ciertas diferencias entre los responsables de la página.

Semlali explicó a Efe que él mismo notificó a la Fiscalía y a la Agencia Nacional de Reglamentación de Telecomunicaciones (ANRT) la voluntad de su cliente de «suspender temporalmente» el sitio Lakome.com mientras se encuentra en la cárcel.

La decisión de cierre temporal anunciada por Anuzla el 14 de octubre chocó con la de su socio y director de la versión francesa, Bubacar Jamai , quien la rechazó de inmediato en otro comunicado y siguió alimentándolo con contenidos hasta que su acceso fue bloqueado dentro de territorio marroquí.

Un responsable de Lakome en francés, Ahmed Bensediq, consideró el cierre de la página web «un abuso» que no favorecerá al caso de Anuzla porque el portal ha sido una de las herramientas de defensa del periodista, al realizar un constante seguimiento del proceso.

Varias decenas de activistas de derechos humanos realizaron hoy una sentada de protesta y solidaridad con Anuzla frente al Tribunal de Primera Instancia de Salé, paralelamente a la audiencia preliminar al periodista y en presencia de un gran número de informadores y representantes de ONG internacionales.

Manifestación de apoyo

«Qué vergüenza, la libertad está en peligro», repetían los manifestantes, que denunciaron la persecución de un periodista por la Ley Antiterrorista y reclamaron su inmediata puesta en libertad.

El Procurador del Rey (fiscal) lo acusó, según la Ley Antiterrorista, de dos delitos relacionados con apología del terrorismo, que le pueden suponer (en el caso de «ayuda consciente a un autor o cómplice de atentado») hasta 20 años de cárcel.

Sirine Rached, miembro de Amnistía Internacional (AI) , consideró «sin fundamento» las acusaciones formuladas contra Anuzla porque «tienen como objetivo castigarle por la independencia editorial de su página web».