Baja la popularidad de Dilma Rousseff debido a los problemas económicos

«Inevitablemente la inflación es lo que más pesa», ha declarado el senador Clésio Andrade, presidente de la Confederación Nacional de la Transporte (CNT), que encomendó la encuesta, en la que Rousseff cae por primera vez desde que comenzó su mandato, de 56,6%, en julio del año pasado, a los actuales 54,2% .

Según la encuesta, Rousseff ganaría las elecciones en primera vuelta con un 52,8% de los votos, seguida de lejos por el socialdemócrata Aécio Neves, con un 17%, y por la ambientalista Marina Silva, con un 12,5%, y el ex gobernador aliado Eduardo Campos, con un 3,7%.

Otra encuesta difundida este fin de semana por el instituto Datafolha también registró una baja de 8 puntos porcentuales en la popularidad de Rousseff, de un 65% a un 57% en los últimos tres meses.

Economía

Entre los factores que contribuyeron a ese desgaste en la imagen de Rousseff se destaca el aumento de la inflación, que está en el límite de 6,5% de la meta establecida por el propio gobierno, afectando principalmente los productos de la canasta básica.

Otro factor importante ha sido el casi estancamiento de la economía brasileña, que crece muy poco en comparación a los demás países emergentes. El PIB Brasil creció sólo un 0,9% en el 2012, mientras el promedio de América Latina fue de un 3,2%.

En el primer trimestre del año el PIB brasileño volvió a decepcionar, con un incremento de un 0,6%, debajo de la expectativa de los analistas, que vienen reduciendo las previsiones de un 4% a menos de un 3% para este año.

El bajo crecimiento brasileño viene decepcionando a los especialistas, que esperaban un boom brasileño con los grandes eventos que se esperan en el país, como el Mundial de Fútbol 2014 y las Olimpiadas Río 2016. La agencia internacional de clasificación de riesgo Standard & Poor’s (S&P) rebajó la perspectiva de nota de Brasil.