Detrás de las protestas hay gato encerrado. Hace unas horas el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, reconocía públicamente que la policía turca se había excedido al reprimir la manifestación en Estambul. Lo hacía después de que un vídeo en «YouTube» mostrara como ... las fuerzas de seguridad agredían con un chorro de agua a un manifestante en la vía pública
Etas protestas empezaron para intentar detener la tala de los árboles del parque Gezi, en Estambul, para la construcción de un centro comercial en la histórica plaza Taksim. Pero se han convertido en una ola de protestas contra el gobierno islamista moderado de Erdogan que recientemente ha prohibido el consumo de alcohol entre las diez de la noche y las seis de la mañana. Medida que no ha causado un gran entusiasmo entre los jóvenes turcos, cada vez más seculares.
Por vídeos como este, Erdogan ha tenido que pedir perdón por la actuación de la policía turca
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