¿Por qué la 95B es la talla más elegida para el aumento de pecho?

La pregunta no es tan sencilla de responder. Por un lado, se habla de que las tendencias de belleza han cambiado o evolucionado y también lo han hecho en este terreno. Si bien hace poco veíamos como las tallas superiores a 100 eran las protagonistas de este tipo de operaciones, ahora ya no es así. La gran mayoría de las mujeres opta por un cierto volumen pero con un acabado totalmente natural. Y esto es lo que les dejará en su cuerpo la talla 95B.

Podemos decir que el volumen que nos ofrece una talla como la mencionada hará que no destaque tanto y que parezca que la operación ha sido solo un sueño. Venimos de una época en la que los cánones de belleza han ido evolucionando y si bien hasta en el propio maquillaje presenciamos la ausencia de colores demasiado llamativos, en el resto de técnicas de belleza, también. Las mujeres quieren sentirse más cómodas con sus elecciones y por ello, las técnicas de cirugía estética siempre las escuchan y les ofrecen las mejores opciones para conseguir esos resultados que tanto desean.

Ahora ya sabemos que la talla 95B es la más demandada para el aumento de pecho, pero, ¿Cómo sé si realmente es para mí? ¿Cuáles son los pasos que se deben dar a la hora de elegir la talla perfecta?

Es cierto que en ocasiones llevamos una idea predeterminada pero luego se va esfumando cuando hablamos con los profesionales. Por eso, siempre será el cirujano quien tenga que hacer un estudio completo. Porque valorará la altura y anchura de la paciente, así como el contorno del pecho e incluso la distancia entre senos. Todo ello y más nos arrojarán los mejores datos para hacernos una idea del resultado final.

También es importante valorar la forma que tienen las mamas naturales. Ya no solo por el tamaño en sí sino por la simetría. Puesto que si se nota demasiado una asimetría en ellas, sería aconsejable el usar diferentes prótesis en cada uno de los pechos. Todo ello tiene la finalidad de poder obtener ese resultado natural que tanto mencionamos.

Es cierto que si se puede elegir, la 95B es la más querida. Pero a veces no depende solo de nuestros gustos. Tal y como vemos, también hay que dejarse llevar por todo el estudio de nuestro cuerpo para conseguir la naturalidad en este tipo de operaciones. Debes saber que la capacidad de los implantes van en centímetros cúbicos, por lo que tienes desde los 80 hasta los 800 CC. Tras una operación de este tipo, es habitual que cambie la letra de la copa pero no el número, porque este último hace referencia al contorno de tu cuerpo en centímetros.

Es cierto que en ocasiones hacíamos todo lo posible en cuanto a remedios caseros para poder ver cómo nos quedaría un aumento de pecho. Pero hoy en día lo podemos tener todo a mano, cuando apostamos por una buena clínica. Como la tecnología también ha evolucionado, y a pasos agigantados, nos encontramos con las aplicaciones de realidad virtual que tienes en clínicas Dorsia. Gracias a ello, podrás ver el resultado más aproximado posible de cómo quedará tu pecho tras la intervención. ¡Seguro que te va a dar una buena alegría!

Aunque tengamos algunas ideas preconcebidas, es cierto que siempre es aconsejable dar con el volumen adecuado. ¿El motivo? Para evitar males mayores. Es decir, si optamos por un volumen más grande de lo que sería aconsejable para nuestro cuerpo, podría hacer que el peso haga que la mama se descuelgue. Además de la aparición de estrías, dolores en la zona e incluso alteraciones en la sensibilidad. Claro que no debemos alarmarnos, simplemente saber que existen riesgos que, con una valoración precisa, quedarán relegados a un segundo plano.

Además de la talla en sí, hay otra elección más que se debe hacer: ¿Qué tipo de implante es el que me conviene? Pues lo cierto es que de nuevo el cirujano tendrá la última palabra, pero debemos añadir que los implantes redondos son los más elegidos, frente a los anatómicos.

Se trata de unos implantes redondos, tal y como nos dice su nombre. De manera que aportarán un buen volumen tanto en la parte superior como en la inferior por igual. Aunque es cierto que tienen más proyección en el polo superior. Como resultado tendrás un escote más llamativo y favorecedor, además de un pecho elevado.

Por otro lado, no nos podíamos olvidar de las prótesis anatómicas (las que tienen una forma de gota). La parte inferior queda más rellena, dándole al pecho un acabado totalmente natural como si no hubiera rastro de operación.

Hoy en día también tenemos que mencionar otro tipo de prótesis, las ergonómicas. Porque se adaptarán perfectamente al cuerpo y al movimiento del mismo y dejará unas cicatrices casi imperceptibles.

Como vemos, sabemos que la talla más elegida para el aumento de pecho es la 95B, pero siempre hay que ponerse en buenas manos para que nos aconsejen, para que nos hagan el estudio preciso y para que podamos disfrutar de un resultado natural, que es lo que buscamos.