Rappel, vidente, abuelo, confidente y feliz marido de José María: «Lo más impactante fue la muerte de mi hijo»

«Llegan en el momento en el que ya tengo una edad y gracias a Dios tengo memoria y me acuerdo de muchas cosas. Es una etapa en la que estoy contento y feliz, y quería recordar cosas positivas. Si esperaba más adelante, pues no sé si voy a vivir tanto, que estoy ya en los 80», ha explicado sobre sus memorias en una larga entrevista para 'Diez Minutos'.

De todas formas, si alguien esperaba una acumulación de sucesos polémicos y escabrosos en sus memorias, probablemente queden decepcionados, según él mismo advierte. «Mi libro no quiere ser un cúmulo de cotilleos para sacar trapos sucios, Dios me libre. Cuento la parte bonita de aquellos a los que les debo una lealtad por la confianza que me han dado», asegura.

La biografía guarda un apartado especial para quien ha sido su compañero fiel durante cuatro décadas, de nombre José María. «Llevamos cuarenta años juntos y creo que ya era momento de contarlo. Y si estoy contando mi vida, él, sin duda, forma parte de ello. No voy a decir que cuando me separé de mi familia he estado solo, porque no es verdad. He estado muy feliz con un compañero de vida maravilloso, casados y contentos», asegura en la entrevista con 'Diez Minutos'.

Según Rappel, José María es una de las personas más eficaces que ha visto en su vida. «Lo resuelve todo y estamos de acuerdo en casi todo, hasta para pedir en un restaurante. Y por ejemplo yo no enciendo el ordenador porque no sé y él lleva toda esa parte administrativa y de gastos estupendamente», destaca.

En el libro también hay un espacio para las penas, pues de otra forma no sería una biografía digna. Y tiene un recuerdo muy especial: «Lo más impactante que he vivido es la muerte de mi hijo, y marcó que yo me dedicara de lleno a esto. Lo asumí, pero predecir su muerte, recién nacido, fue muy duro. Le diagnosticaron hidrocefalia y no llegó a vivir un año». Otro más se le viene a la mente: «Y la muerte de mi hermana fue un palo muy gordo, porque se suicidó. Ella siempre venía los lunes a comer a casa y ese lunes no apareció. Llamé a su casa, no lo cogía, y fui. Un disgusto enorme».

'El futuro es ayer' también es una oportunidad de comprobar la evolución del personaje a través de las fotografías incluidas en el libro, con sus indescriptibles gafas y túnicas. «La gente se piensa que me han hecho a propósito la montura, y no, la encontré en una tienda. Y fíjate si estaba yo previendo mi futuro que pensé que igual dejaban de hacerlas, y me compré diez o doce», relata.

Rappel es padre de tres hijos de un matrimonio anterior, presume de abuelo y también asegura que sus hijos siempre han sabido convivir con su popularidad. «Lo vivieron de manera normal, pero desde que tenía en casa el despacho para echar las cartas y ya luego llegó la época de la televisión...». Y se apresura a asegurar que nunca fue un padre ausente a pesar de su trepidante ritmo de vida.

«Yo a ellos los veía y llegaban a casa por la tarde y yo estaba. Y los veraneos eran sagrados, siempre hemos ido a la playa. Y en lo que he podido a mis hijos les he hecho la vida feliz y agradable. Han ido a los mejores colegios, las mejores universidades y cuando han tenido edad, les he comprado su primer coche», resume en 'Diez Minutos'.