Karim Benzema, más allá del fútbol: su novia Jordan Ozuna, sus hijos y entregado musulmán

Benzema siempre ha sido celoso de su intimidad y ha intentado alejar su vida privada del foco mediático. Así mismo, son pocas las ocasiones en las que el futbolista ha hablado públicamente de sus seres queridos. Lo poco que se sabe sobre ellos es gracias a su documental. Eso sí, si su nombre hoy copa titulares como reconocimiento a su carrera profesional, hubo una época en la que lo hizo por protagonizar polémicas por las que fue expulsado de la selección francesa.

Aún no se ha cumplido un año desde que la justicia francesa dictaminó que Benzema era culpable de complicidad en el intento de chantaje a su excompañero de la selección Mathieu Valbuena por un video sexual. El futbolista fue condenado a un año de prisión con suspensión de la pena, una multa de 75.000 euros y una indemnización a Valbuena de otros 80.000. También fue sonado el caso 'baby escort', en el que se le acusó de haber recurrido a una prostituta menor de edad. Delito del que fue absuelto.

Durante estos últimos meses, el francés ha tenido una vida discreta y alejada de la polémica. Así mismo, fue el pasado agosto cuando se hizo público que Karim había comenzado una relación sentimental con la modelo e influencer Jordan Ozuna, con la que ha disfrutado de sus vacaciones estivales y que se ha convertido en uno de sus pilares fundamentales. De esta forma, la estadounidense se suma a la larga lista de noviazgos que ha tenido el delantero.

No obstante, pese a que se le ha vinculado a muchas mujeres, las dos que de verdad han marcado su vida sentimental son Chloé De Launay, madre de su primogénita Mélia y Cora Gauthier, progenitora de Ibrahim, el segundo hijo del francés. También se rumorea que fruto de sus idas y venidas con Chloé tuvieron a Nouri -no han confirmado ni desmentido que él sea el padre-. Son incontables las ocasiones en las que Benzema ha irradiado felicidad al lado de los menores, quienes, de verdad, llenan de felicidad del deportista. Y es que, junto a su pasión por el fútbol, son su mayor debilidad.

Benzema es un hombre que no olvida sus raíces y el arraigo que siente por ellas. Además, en una de las pocas entrevistas que concede, Karim confesó que es un entregado musulmán, que cree en el islam y que escucha el Corán antes de cada encuentro deportivo. No obstante, para seguir creciendo en su profesión y no bajar el rendimiento, el delantero decidió dejar de hacer el Ramadán. Una sacrificada determinación que le ha permitido lograr un sueño que muy pocos futbolistas consiguen a lo largo de su carrera.