Carlos III en el ojo del huracán: denuncian malas condiciones laborales en su finca ecológica
Los jardineros de Highgrove House relatan condiciones laborales difíciles bajo la estricta supervisión del monarca
¿Preocupación por Carlos III? Un vaso roto en el ojo desata especulaciones sobre su salud
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Iniciar sesiónLa imagen pública de Carlos III, marcada por su firme compromiso con la sostenibilidad y la agricultura ecológica, se ve ensombrecida por las denuncias de varios extrabajadores de su finca de Highgrove House, en Gloucestershire. Según reveló 'The Sunday Times', 11 de los 12 ... jardineros que formaban parte del equipo encargado del cuidado de los jardines abandonaron sus puestos desde marzo de 2022. La mayoría de ellos, según el medio, percibía el salario mínimo legal en el Reino Unido.
El medio británico describe un entorno laboral marcado por la «baja moral», la falta de recursos y una presión constante por cumplir con las exigencias del soberano, conocido por su meticulosidad en asuntos de horticultura. «Carecían de recursos y luchaban constantemente para cumplir con las solicitudes del Rey», reza una de las quejas internas recogidas por el citado diario, que además asegura que algunos miembros del equipo «sufrieron lesiones físicas al intentar mantener el ritmo».
Uno de los extrabajadores denunció haber sido apartado por no conocer el nombre de una flor. Según publicó 'The Times', la reacción de Carlos III fue tajante: «¡No vuelvas a poner a ese hombre delante de mí!». Otro jardinero habría recibido una nota con la palabra «¡NO!» escrita a mano, después de haber nombrado incorrectamente una planta en uno de los informes rutinarios. En declaraciones recogidas por el mismo medio, otro de los jardineros afirmó que el ambiente laboral transmitía la idea de que «deberías estar agradecido de que te hayamos dado un trabajo y de que estés trabajando para el Rey, la persona de mayor rango del país».
Desde 2021, la gestión directa de los jardines recae en la King's Foundation, una organización benéfica del propio monarca. La fundación defiende que la rotación de personal en Highgrove «es incluso más baja que la media nacional» y asegura que revisa de forma regular las condiciones salariales en línea con las recomendaciones del gremio de jardineros profesionales. A pesar de ello, una evaluación externa realizada en 2023 ya había alertado sobre malas prácticas de gestión, problemas de salud mental en el equipo y sueldos que apenas alcanzaban las 8,90 libras por hora (unos 10,30 euros), cifras por debajo de lo habitual en jardines de alto nivel.
Highgrove House es una propiedad adquirida por el entonces Príncipe de Gales en 1980 y desde entonces se ha convertido en uno de los santuarios personales del actual monarca. El jardín silvestre, el ornamental, el huerto ecológico, las colmenas y los gallineros forman parte de un ecosistema que alimenta la marca de productos orgánicos Duchy Originals, impulsada por Carlos en 1990. La residencia también recibe anualmente unos 40.000 visitantes, lo que añade presión al equipo de mantenimiento.
Aunque desde su ascenso al trono en 2022 el hijo de Isabel II ha intentado proyectar una imagen cercana y accesible, también ha protagonizado episodios de impaciencia que han quedado grabados por las cámaras. Uno de los más comentados ocurrió en su primer día de reinado, cuando fue captado maldiciendo una pluma que perdía tinta: «¡No soporto esta maldita cosa!».
El escrutinio sobre las condiciones laborales en Highgrove reabre un viejo debate en torno a las exigencias del monarca en su vida privada y el coste humano de mantener en pie su «paraíso ecológico». La King's Foundation, por el momento, no ha anunciado nuevas medidas tras la publicación de las quejas en 'The Sunday Times', ni se ha pronunciado sobre las cifras concretas de dimisiones.
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