Este es el número de huevos que puede comer tu hijo según su edad hasta la adolescencia

Para salir de dudas, Mariana Serrano, colaboradora de Pazo de Vilane, licenciada en Farmacia por la Universidad de Navarra y en Ciencia y Tecnología de los Alimentos por la Universidad de Zaragoza, explica que, en primer lugar, los progenitores deben seguir las recomendaciones del pediatra, «su criterio prevalece siempre», advierte. Aún así, asegura que lo habitual es que este 'súper alimento' se introduzca en la dieta de los más pequeños a partir de los 6 meses y de forma gradual para asegurarnos de que el bebé no sufre ninguna alergia o intolerancia a la yema o a la clara.

Explica que se introduce la yema y la clara de forma separada y sucesivamente, ya que de este modo será fácil identificar a qué parte del huevo es alérgico el niño en caso de que este le provoque alguna reacción. «Lo habitual es empezar con un cuarto de yema cocida, que podemos añadir al puré de verduras que el bebé ya esté tomando. En días sucesivos se va repitiendo el procedimiento, aumentando la cantidad gradualmente. Esto es: media yema, tres cuartos, y la yema completa el segundo, el tercer y el cuarto día, respectivamente.Pasados unos dos o tres días, y tras comprobar que el niño no presenta ninguna reacción, se puede introducir la clara cocida también en el puré y de forma similar la yema, aumentando de cuarto en cuarto. Cuando hayamos comprobado que el alimento le sienta bien, podremos darle al bebé un huevo cocido completo, en trocitos, incluirlo en el puré, o incluso ofrecerle una tortilla francesa o un huevo pasado por agua».

¿De qué manera pueden ir aumentando su ingesta?

La clave aquí, para detectar posibles reacciones alérgicas e intolerancias, es hacerlo de forma gradual y con menos de 3 o 4 raciones por semana. E introducir primero la yema y luego la clara, o lo que indique el pediatra en cada caso.

¿Qué beneficios les aporta?

El huevo es un 'súper alimento' que aporta muchísimos beneficios. Sin ir más lejos, su aporte proteico de alta calidad es óptimo para el desarrollo y crecimiento de los niños.

Y además de su completísimo aporte nutricional, tiene un bajo índice calórico y es un alimento muy saciante, lo que ayuda a evitar el hambre entre horas.

Por otro lado, estamos hablando de un alimento que es una fuente rica tanto en vitamina A como en Vitamina D -cuya síntesis se puede ver disminuida en caso de que no nos expongamos al sol- así como de casi todas las vitaminas.

Asimismo, la yema del huevo ayudará con el sistema ocular y nervioso de los más pequeños ya que posee colina, un nutriente fundamental, que influye en el desarrollo de la vista, así como del cerebro.

¿Cuántos huevos pueden tomar a la semana según las edades de crecimiento?

Mi recomendación, siempre que estemos hablando de niños sanos y que no presenten ninguna alergia o intolerancia, es que los menores de 3 años tomen menos de 3 o 4 raciones por semana. Cuando empiezan la etapa escolar esa cantidad puede aumentarse a 4 raciones por semana. En el caso de los adolescentes estaríamos hablando de 6 raciones por semana, pero dependerá de su peso, constitución, etc.

Se ha puesto muy de moda entre los adolescentes tomar huevo por su contenido en proteína de cara a ganar mayor masa muscular, ¿Cuántos huevos pueden tomar al día?

Siempre que lleven una dieta equilibrada y gocen de buen estado de salud, pueden consumir entre 1 o 2 huevos completos al día. En este sentido, el médico o pediatra valorará sus estados ponderales, si tienen un estilo de vida activo, etc.

¿Qué beneficios les aportan los nutrientes del huevo?

Muchísimos, sin duda. Las proteínas de alta calidad les ayudan en la formación de tejidos. Además, sus ácidos grasos omega 6 y 3 intervienen en su salud visual y mental. Y como es un alimento rico en calcio y otros minerales, es perfecto para reforzar la salud ósea.

Además, la luteína y zeaxantina que contienen los huevos previenen la aparición de la degeneración macular y cataratas.

Por otro lado, los huevos son ricos en antioxidantes, que ayudan a proteger las células del cuerpo del daño causado por los radicales libres y las enfermedades crónicas asociadas, como las cardíacas y el cáncer.

Se cree que mejoran algunos biomarcadores de enfermedades cardíacas. Estos incluyen biomarcadores inflamatorios, como los niveles sanguíneos de interleucina-6 y proteína C reactiva.

Asimismo, está comprobado que podría favorecer la pérdida de peso. Y es que, gracias a su alto contenido de proteína magra, los huevos pueden tener un efecto saciante. Por tanto, es un alimento a tener en cuenta en caso de obesidad infantil.

¿Qué riesgos puede suponer un consumo excesivo de huevos?

Para la mayoría de adultos sanos es seguro comer 1-2 huevos al día, si bien esto sería una recomendación general, pues cada persona es única y sus necesidades nutricionales también.

Un consumo excesivo de huevos podría aumentar el riesgo de padecer alergias y de otras patologías, en gran parte debido a que cuando una persona abusa de un alimento concreto no lleva una dieta equilibrada. El huevo es un alimento excelente, pero debe ir acompañado de otros en su justa medida, como verduras y frutas de temporada, cereales integrales, legumbres, pescados, carnes magras, leche y los lácteos, agua en abundancia...