Jessica Bueno, una Wag en Éibar

La ex de Kiko Rivera se presentó ayer como invitada estrella en la fiesta que el diseñador Juanjo Oliva ofreció tras el desfile donde presentó la colección que ha diseñado para Elogy . Bueno llegó la última al photocall que montaron en el hotel Me de la plaza de Santa Ana. Con una convocatoria llena de grandes caras de la moda: Nieves Álvarez, Mar Flores... Jessica se codeó con modelos que seguro han sido un ejemplo para ella.

En conversación con ABC, Bueno explicó que le encantaría desfilar en la Semana de la Moda de Madrid: «Para cualquier chica sería un sueño poder estar», dijo tras matizar que para ella «es un orgullo trabajar en moda, sea lo que sea». Será que la timidez le hace conformarse. Porque aunque fue la «gran estrella» de la fiesta de Juanjo Oliva, el diseñador no posó con ella en el photocall y tampoco la llamó para desfilar. «No se lo voy a pedir (desfilar la próxima edición) porque soy muy tímida para esas cosas», se sinceró.

Han pasado cinco meses desde que la modelo se mudara a Éibar. Allí, dice ser muy feliz con su vida y no echar de menos la ciudad. «Yo soy de un pueblo muy pequeñito de Sevilla así que estoy acostumbrada a la vida tranquila», y confesó que «si lloviese un poquito menos sería mucho mejor». Jessica está muy adaptada a su vida allí, sobre todo porque convive con sus dos grandes amores: su hijo y su novio, el futbolista Jota Peleteiro .

Tan enamorada está que luce orgullosa en su mano izquierda el nombre de su novio. Dice creer que nunca se va a arrepentir de ese tatuaje: «Ha significado tanto en mi vida y me ha ayudado tanto...», explica. Precisamente su vida en el norte la define como «muy tranquila» y cuenta que está muy adaptada: «Solemos quedar siempre las novias de los jugadores, de los compañeros de Jota». Jessica es la cara más famosa de las Wags de Éibar.