Vox pierde más de 600.000 votos respecto a 2019 pese a mejorar el resultado de mayo

Los datos confirman que la marca tiene más tirón a nivel nacional que regional

España pidió moderación y quitó 1,8 millones de votos a los extremos

El dirigente de Vox Santiago Abascal, en un mitin durante la campaña ABC

La política, como el fútbol, es 'resultadista'. Poco importa mejorar el porcentaje del voto significativamente en apenas dos meses si en el ámbito nacional se venía de más arriba y si, sobre todo, los escaños obtenidos son insuficientes para lograr el gran objetivo: ... gobernar. El análisis de los datos de Vox el 23J deja claro que el tirón de Santiago Abascal -o del partido a nivel estatal- sigue siendo mucho mayor que el de sus divisiones territoriales.

Vox, respecto a las elecciones generales de noviembre del 2019, perdió 623.235 votos el pasado domingo. Una cifra significativa, que le condena a una merma de diecinueve diputados, pero que en la formación no ven suficiente como para echarse a temblar.

No en vano, en la dirección remarcan estos días que el suelo del partido sigue siendo muy alto. Lleva menos de cinco años en las instituciones y, en una contienda muy plebiscitaria, donde Alberto Núñez Feijóo (PP) y Pedro Sánchez (PSOE) se reivindicaron como «el voto útil» a derecha e izquierda, retiene 3.033.744 votantes. Un número todavía superior a los 2.677.173 sufragios que obtuvo el 28 de abril del 2019, cuando irrumpió por primera vez en el Congreso con veinticuatro escaños.

Si se compara el porcentaje de voto obtenido por Vox el 23J y el 28M en las comunidades autónomas donde se celebraban, aparte de las municipales, comicios regionales, las noticias son buenas para los derechistas. En once de las doce autonomías donde hubo elecciones, Vox mejora su resultado. Solo en Canarias empeora y lo hace por apenas unas décimas (del 7,85% al 7,57%).

Lo más llamativo es el contraste en la Comunidad de Madrid, donde Vox asume las dificultades a nivel autonómico, reconocen en el partido, de competir con «el huracán» de Isabel Díaz Ayuso. Allí, Abascal (14,02%) dobla el porcentaje logrado por Rocío Monasterio (7,31%) hace dos meses. Precisamente, en la circunscripción capitalina, esos siete puntos que gana Vox son los que pierde el Partido Popular.

LAS CIFRAS

Un buen suelo

3,03

Vox, pese a su retroceso respecto a las últimas generales, logró más de tres millones de votos.

La Comunidad de Madrid

x2

Vox dobló su porcentaje de voto en Madrid respecto a las autonómicas. Del 7,31, al 14,02 por ciento.

Otras regiones donde Vox mejora notablemente respecto a mayo son Castilla-La Mancha (casi cinco puntos), Extremadura (más de cinco puntos) y Región de Murcia (más de cuatro puntos). En Extremadura Vox gobierna en coalición con el PP tras investir a la popular María Guardiola -que prometió que no compartiría Ejecutivo con los de Abascal- y en la Región de Murcia la formación, en plena campaña, votó en contra de la investidura del también popular Fernando López Miras porque exige entrar en el Gobierno autonómico.

Esta realidad choca diametralmente con un hecho incontestable: la comparación con noviembre del 2019 es muy mala para Vox. En Murcia, por ejemplo, ganó las elecciones entonces con el 28,16 por ciento de los votos y ahora, con casi siete puntos menos, es tercera fuerza. Vox ha logrado un buen suelo, sí, pero quizás el excepcional resultado de los 52 diputados fuese algo coyuntural. Un mes antes, las calles de Barcelona ardían por la sentencia del 'procés'.

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