Elecciones 23J
Vox se derrumba 19 escaños y no logra su objetivo de echar a Sánchez de La Moncloa
El partido no rentabiliza ninguno de sus pactos regionales pero se mantiene como tercera fuerza
Santiago Abascal: liderazgo, fuera de cuestión pese al mal resultado
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Madrid
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Iniciar sesiónTodo estaba preparado para una gran fiesta. El partido de Santiago Abascal animaba a sus simpatizantes desde primera hora de la tarde, antes del cierre de los colegios electorales, a asistir a su sede nacional, en la madrileña calle de Bambú, para celebrar lo ... que parecía que iba a suceder: que el PP y Vox iban a rebasar la mayoría absoluta logrando un cambio de ciclo político en España. El sondeo de GAD3 para Telecinco presagió 150 escaños para los populares y 31 para los derechistas, pero esta vez erró el tiro.
El PP, al 99 por ciento escrutado, consiguió 136 diputados y Vox, 33. Para los de Abascal el resultado es innegablemente malo. Supone un desplome de diecinueve escaños -en noviembre del 2019 cosechó 52-, pero es que además el resultado de los populares es insuficiente para un cambio de color en el Palacio de la Moncloa. La nota positiva, comentaban fuentes del partido ya con el escrutinio muy avanzado, es que la izquierda tampoco suma, salvo alianza contra natura con el partido de Carles Puigdemont. Sería un 'Frankenstein mejorado'.
En la formación de Abascal se había asumido hace tiempo que no se iba a repetir el resultado del 10N, pero se consolaban con la posibilidad -que apuntaban todas las encuestas menos la del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS)- de ser decisivos para la conformación de un Gobierno de coalición con el PP, como ha sucedido ya en Castilla y León, en la Comunidad Valenciana y en Extremadura. Los cálculos eran que los de Alberto Núñez Feijóo se iban a acercar a los 150 escaños y que, en ese caso, los más de treinta de Vox serían imprescindibles.
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Los datos de anoche no ofrecieron ninguna buena noticia a los de Abascal. Para empezar, porque no rentabilizaron nada los acuerdos autonómicos con el PP. Ni en ninguno de los lugares donde gobiernan juntos -aunque acción ejecutiva solo han demostrado hasta ahora en Castilla y León- ni tampoco en Baleares, pese al histórico acuerdo programático para garantizar la enseñanza en español en todas las etapas educativas.
En Castilla y León Vox se deja cinco escaños respecto al 2019 y se queda con solo uno, en la Comunidad Valenciana baja de siete a cinco, y tanto en Extremadura como en Baleares pierde uno de sus dos. El partido de Abascal retrocede en la mayoría de comunidades autónomas -por ejemplo en la Comunidad de Madrid caen de siete a cinco y en Andalucía, de doce a nueve- y se mantiene solo en Cataluña (2), Asturias (1), Cantabria (1) y Aragón (1). En esa última región, aún está pendiente la negociación de un posible ejecutivo con el PP de Jorge Azcón.
Caída clave en Murcia
En su pulso con los populares en la Región de Murcia, donde Vox votó en contra de la investidura de Fernando López Miras, a solo dos escaños de la mayoría absoluta, en plena campaña, Abascal también sale mal parado. Vox ganó en Murcia en 2019 con tres diputados y ahora cae a la tercera posición con dos. Habrá que ver si, a pesar de ello, el líder de la formación derechista mantiene su exigencia de entrar en el Gobierno regional.
Evolución voto Vox
Votos escrutados al 99,94%
52
15,09%
33
12,39%
24
10,26%
0
0,20%
Diputados
0
0,23%
% sobre el voto
Nov.
2015
2016
2023
2019
2019
Santiago
Abascal
Ministerio del Interior / ABC
Evolución voto Vox
Votos escrutados al 99,94%
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2023
2019
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Santiago
Abascal
Ministerio del Interior / ABC
También cae en Ceuta a la tercera posición tras ganar en 2019, cuando consiguió el único diputado de la ciudad autónoma. Más allá de los diferentes territorios, el partido también obtiene un peor resultado en votos y en porcentaje que el esperado. En el núcleo de Abascal ya se habían hecho a la idea de una significativa pérdida de escaños, pero la achacaban a la ley D'Hondt por la previsible subida del PP y la posibilidad de que se hiciese con varios de los escaños que en 2019 fueron a parar a la tercera fuerza por la menor distancia entre ambas.
Abascal felicita con sorna a Feijóo por su victoria «sin depender de Vox», «como él quería», y le pregunta si ahora pactará con el PSOE
Internamente se creía que el número de votos sería similar al de 2019, aunque en diputados no se tradujese en el mismo éxito. Vox superó de nuevo los tres millones de votos, pero, con el 99 por ciento escrutado, se dejó más de 600.000. En porcentaje cayó casi tres puntos (del 15,07 al 12,4%) y se mantuvo tercero, por encima de Sumar.
La valoración del líder
Al filo de la medianoche, Abascal salió a la sala de prensa de Bambú a hacer declaraciones a los medios. Con caras largas, lo esperaban dirigentes como el vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo; el secretario general, Ignacio Garriga; el portavoz en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros; el vicepresidente Jorge Buxadé; la diputada María Ruiz; la líder en la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio; y la número cinco por Madrid, Pepa Millán.
Con ironía, Abascal comenzó felicitando a Núñez Feijóo por su victoria «sin depender de Vox», «como él quería», y le preguntó si iba a mantener su oferta al PSOE y le iba a tender la mano. Sin autocrítica, acusó a los medios y a las encuestas de apelar al «voto útil» y de «perjudicar la suma» de la derecha. Como advirtió en varios mítines durante la campaña, apuntó que los sondeos, que apuntaban a una victoria holgada de PP y Vox por encima de la mayoría absoluta, algunos «vendieron la piel del oso antes de cazarlo».
«Estamos absolutamente preparados tanto para hacer oposición como para una repetición electoral», zanjó, después de haber lamentado que el PSOE aún podría reeditar su pacto con «comunistas, separatistas golpistas y terroristas». Con rostro serio, salieron a saludar a los cerca de doscientos simpatizantes que esperaban fuera.
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