Sin taxis para personas en silla de ruedas: «Tardan una hora, si llegan»

En la capital apenas hay 358 vehículos adaptados, por debajo del 5% que exige la ley, y en emisoras dispersas. En 2019 superaban los 550

A la caza de taxis pirata en Barajas

Carlos, en silla de ruedas desde los 16 años, ya ha renunciado a coger taxis ángel de antonio

Madrid

04/03/2025 a las 04:38h.

Carlos, que lleva en silla de ruedas desde que un accidente en la playa le dejó tetrapléjico con 16 años, ya ni intenta coger un taxi. No hay forma de encontrar vehículos adaptados para moverse por la ciudad como cualquier otra persona, denuncia. «Vivo en ... Móstoles y si ya es difícil encontrar un coche normal, imagínate un eurotaxi. Nunca ha sido fácil, ni cómodo ni barato», reconoce. En las paradas de su zona, apunta, no suelen estar, y cuando llamas a las emisoras puedes estar una hora o más esperando. «Eso si lo encuentras», añade, porque no se pueden reservar con antelación.

Los ejemplos de malas experiencias se suceden en su relato. Como aquella angustiosa noche que la emisora no lograba encontrar los únicos dos modelos de vehículo adaptado en los que, por su altura, puede montar. O el día que tuvieron que enviarle un taxi desde Madrid, después de una hora de espera, para que pudiera volver a su casa después de tomar algo en un parque a media hora andando de su casa. «A mí me encantaría ir más a Madrid, pero si me sale caro y no me aseguran que pueda ir y volver a la hora que quiera... Al final es muy triste, todo esto va haciendo tu burbuja más pequeña. Tu movilidad y tu libertad se queda perimetrada a tu espacio de seguridad», lamenta.

Las vivencias de Carlos no son un caso aislado. Como llevan meses denunciando asociaciones como Famma (Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad Madrid), el descenso en picado del número de eurotaxis es tal que, en la capital, no llegan al mínimo del 5% estipulado por ley que se alcanzó en 2019, cuando la flota superaba los 550 vehículos. Hoy, de los 15.700 taxis que circulan por Madrid, apenas 358 (3,33%) son adaptados.

Javier Font, presidente de Famma, reconoce que llevan cuatro años avisando de esta 'tormenta perfecta' que sufren las más de 222.000 personas con discapacidad física que viven en la región. Las causas de esta caída sostenida en los últimos años son múltiples. «Cuando se empezaron a instalar las zonas de bajas emisiones se fomentó el eléctrico puro, dándole las mismas ventajas que a los eurotaxis al permitirles trabajar todos los días de la semana», apunta Javier Font, presidente de Famma.

Jesús Fernández, vicepresidente de la Federación Profesional del Taxi, admite que ellos ya avisaron al consistorio en 2021, cuando se puso en marcha esta medida, que esto iba a desincentivar a los conductores de turismos adaptados. «Aunque la subvención sea mayor, hay que invertir en el coche, que normalmente es una furgoneta a la que hay que cambiar la etiqueta, y en la rampa, que pueden ser otros 25.000 euros. Así, ahora tenemos 200 eurotaxis menos y más de 700 cero», asegura el portavoz de esta agrupación, que cree que los adaptados recuperarían su ventaja competitiva si el Ayuntamiento de Madrid aplicase el reglamento de 2023, que permite volver a imponer la libranza obligatoria a todos los vehículos, excepto los eurotaxis.

A esta falta de coches hay que sumar, insisten las asociaciones de personas con movilidad reducida, la «mala gestión» de estos servicios, a los que no se está dando prioridad. «Están en emisoras dispersas. Si hubiera una única línea para este servicio, mejoraría mucho la coordinación», lamenta Font. De hecho, los taxis preparados para llevar sillas de ruedas ni siquiera se pueden reservar con 24 horas de antelación, como cualquier otro vehículo. Al final, no hay volumen suficiente para garantizar el servicio.

José Manuel Soria conduce un taxi adaptado desde hace ocho años isabel permuy

Mala gestión

Lo sabe bien José Manuel Soria, que lleva ocho años al volante de un eurotaxi y más de veinte años como conductor. Él se animó a adaptar su furgoneta porque consideraba que los vehículos grandes era un buen negocio. Llevar a personas con discapacidad física es uno más de los servicios que ofrece. «Hay mucho trabajo y es esencial que se haga, pero no es de calidad. Al final entre que vas al punto de recogida, abres la rampa y aseguras la silla, pierdes un tiempo que nadie te paga», asegura. Muchas carreras van asociadas a consultas médicas, por lo que el grueso del trabajo se desarrolla por la mañana y suelen ser carreras cortas, lo que también desincentiva a muchos conductores.

Otro problema es que, al haber tanta escasez de vehículos preparados para llevar sillas de ruedas, solo llegar al punto de encuentro exige a los taxistas recorrer distancias muy largas. De hecho, mientras Soria expone esta problemática desde la parada de taxis de Ifema, le llega un aviso para recoger a un cliente en el Paseo de Extremadura, a más de 20 kilómetros. «Hasta allí no puedo ir, pierdo casi una hora. Da pena, porque por una mala gestión se queda un usuario muy importante esperando mucho tiempo o sin servicio. A veces hago carreras por ayudar, no porque sea rentable, porque me sale mejor irme al aeropuerto», lamenta. Desde las asociaciones admiten que hay eurotaxis «con cero servicios de este tipo al año».

Sobrecoste en plataformas

Si el eurotaxi fuera un buen negocio, ironiza Soria, las VTC se hubieran sumado a él en masa. De hecho, apuntan desde Famma, otro problema que tienen es que dependiendo de la plataforma de contratación los servicios para personas con movilidad reducida «pueden ser entre un 40% y un 60% más caros, una práctica que atenta contra los principios de igualdad y no discriminación», denuncian.

Conscientes de esta problemática, la Comunidad de Madrid obligó a los titulares de diez o más autorizaciones de VTC a que al menos uno de cada diez vehículos esté preparado para sillas de ruedas. Con esta medida, como tarde en mayo debía haber al menos 576 eurotaxis más en las calles, afirmó Luis Miguel Torres, director General de Transportes y Movilidad de la región, en una mesa de debate organizada por Famma. Además, permitirán que circulen con distintivo C. Por otro lado, precisan fuentes de la consejería, este año se pondrán en marcha líneas de ayudas a los conductores que realicen viajes adaptados y se ha creado un buzón de denuncias para canalizar las incidencias.

Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid cuenta con una línea específica de ayudas directas para la adquisición de vehículos adaptados (20.000 para los nuevos y 10.000 para los usados) e incluirá nuevos incentivos en la futura ordenanza que regulará el sector del taxi, aún en tramitación, que también permitirá circular por la capital a los eurotaxis con etiqueta C. Con todas las partes en sintonía, solo falta diligencia para que las peticiones de las personas con discapacidad a las emisoras no se queden sin responder.