Las alternativas al soterramiento de la A-5 alivian los atascos en el primer día de obras

Así, a primera hora de la mañana, mientras el Ayuntamiento de Madrid pedía de nuevo cambiar el coche por el transporte público, se han dejado ver los primeros atascos. Se han registrado complicaciones circulatorias en cinco kilómetros de la A-5 (Madrid-Extremadura), a la altura de Campamento. Además, también se registran retenciones desde primera hora del día en el acceso a la A-5 por la M-40, a la altura del kilómetro 32 de la carretera de circunvalación, en la zona de La Fortuna, en Leganés, a la altura del kilómetro 10 de la autovía, según informó la DGT.

Este periódico, que ha realizado a primera hora de la mañana el trayecto Alcorcón-Atocha, tanto en coche, a través de la A-5 como en Cercanías, ha comprobado que para el tráfico una de las zonas más congestionadas en la mencionada autovía ha sido la de Cuatro Vientos. Este es el nudo de los autobuses interurbanos, que tienen ahí su nueva cabecera, en lugar de llegar hasta Príncipe Pío. A pie de carretera, se observa una importante cola de autobuses y personal de información.

En la zona de Aluche y Campamento, antes de que comience la reducción de capacidad de la A-5 a la mitad, el tráfico era muy lento, con paradas constantes, pero no se ha producido el colapso pronosticado. De hecho, según datos de Google Maps recabados por este diario a pie de carretera, el trayecto se ha extendido 21 minutos por las retenciones. Si habitualmente entre las 8.00 y las 9.00 horas se tarda entre 20 y 45 minutos en cubrir esta ruta, hoy este diario ha tardado 45 minutos, unos 15 más de la media.

El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, ha visitado el Centro de Gestión de la Movilidad de Madrid para ver cómo se ha desarrollado la hora punta en la A-5: «Sin incidencias reseñables hasta el momento. La zona con más densidad de tráfico se ha localizado en la zona de estrechamiento de carriles, a la altura de Padre Piquer, hasta Cuatro Vientos».

Tal y como ha celebrado el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, muchos madrileños que usan habitualmente la A-5 han decidido hoy dejar el coche en casa: el tráfico se ha reducido un 26% en hora punta.

En Cercanías, se divisa más viajeros de lo habitual. En la estación de Alcorcón había decenas de personas esperando la llegada del tren, siendo la frecuencia de estos de cinco minutos, con bastante puntualidad. Además de dos trabajadores de seguridad, hay otra trabajadora de refuerzo informando a los pasajeros. El trayecto hasta Atocha, fluido, se ha completado en media hora.

Hasta las 10.00, ha informado Renfe la demanda se ha incrementado un 17% en los refuerzos en la C5, con un 60% más en Cuatro Vientos y un 20% más en Alcorcón. Estas dos han sido las estaciones con más viajeros. La frecuencia en hora punta y semipunta ha oscilado entre los 4 y los 6 minutos.

El Consorcio Regional de Transportes ha publicado en torno a mediodía un primer balance calificando como «éxito» el plan de movilidad. «De 6.00 a 9.00 horas se ha producido un aumento de viajeros en la estación de Metro de Cuatro Vientos del 164%. En la estación de Puerta del Sur, el aumento ha sido del 29%. En total, en toda la red de Metro el incremento ha sido de un 7,16% con respecto al miércoles de la semana pasada«.

En cuanto a los interurbanos, añaden «han circulado con normalidad en sus nuevas rutas sin incidencias reseñables y cumpliendo horarios». No obstante según ha podido comprobar este diario, a primera hora de la mañana entre los viajeros ha reinado cierto desconcierto (y enfado) por no poder llegar al corazón de Madrid con sus rutas habituales. Según las primeras estimaciones, han disminuido en torno a un 8% los usuarios de los recorridos interurbanos.

Más de 150 agentes destinados al operativo del Consorcio Regional de Transportes, Metro, EMT, autobuses interurbanos y Cercanías, han recordado, se han encargado de atender a los usuarios en las 14 estaciones afectadas, con especial atención en Cuatro Vientos.